Por Enrique Sánchez (@RikyTravolta)
Barry Sonnenfeld, el realizador de la franquicia de Hombres de negro, llevará a la pantalla grande la historia de Metal Men, el cómic escrito por Robert Kanigher que cuenta la historia del Dr. William Magnus y sus seis robots con gran inteligencia y personalidades variadas: Gold, Iron, Lead, Tin, Mercury y Platina, que nació creyéndose humana y se enamoró de su creador. Aún no se sabe quién escribirá el guión, y mucho menos hay pistas del reparto, pero esta historia que mezcla el humor y la ciencia ficción definitivamente le quedará bien a un director como Sonnenfeld.
Nicolas Winding Refn, director de Drive (2011), se encargará de dirigir una serie de televisión sobre Barbarella, el cómic escrito e ilustrado por el francés Jean-Claude Forest que durante mucho tiempo se consideró como el primer cómic para adultos, y que cuenta las aventuras de una joven que viaja de planeta en planeta y que de alguna manera siempre termina teniendo experiencias sexuales fuera de lo común.
Sam J. Jones se hizo famoso luego de interpretar al héroe del espacio Flash Gordon en la cinta homónima de 1980. La película de bajo presupuesto se convirtió en una cinta de culto debido, principalmente, a que la famosa banda inglesa Queen compuso el soundtrack. Pero a Jones no le fue muy bien en su carrera como actor, y por azares del destino ahora es un guardaespaldas de ejecutivos y políticos mexicanos, así que no hay que sorprendernos si en estas épocas de campañas electorales vemos al actor detrás de algún candidato.
Dubai es conocida como la ciudad más rica del mundo, y cuenta con una serie de atracciones y destinos turísticos impresionantes, a los que ahora se sumará el parque temático Marvel Adventure, que consistirá en una extensa zona dedicada a los superhéroes de cómics, con un énfasis en los Avengers, el grupo de héroes que hace poco arrasó en taquilla. Y hablando del éxito de Los vengadores, Peter Berg mencionó en una entrevista con MTV News que el fracaso en taquillas de Battleship fue culpa de la película de los héroes de Marvel, y le ha pedido al público que “lo que de veras necesito es que vayan a ver Battleship ahora que ya vieron Los vengadores como cinco veces. Si la gente hace eso, definitivamente haremos una secuela. Me encantaría hacer una secuela de Battleship”. ¿Y qué opina el público? ¿También les gustaría ver una secuela de esta película?
El reverenciado escritor de cómics inglés, Alan Moore, ha comenzado a trabajar en una serie de cortometrajes titulada Show Pieces, que –muy a la manera de las novelas gráficas de Moore–, consta de varios arcos argumentales que se mezclan en un relato oscuro. El primer episodio se llama Act of Faith, y fue dirigido por Mitch Jenkins. Moore siempre se ha visto envuelto en riñas con las compañías productoras que han adaptado sus cómics a la pantalla grande, por lo que el escritor renegó durante mucho tiempo de trabajar en cualquier proyecto cinematográfico. Solo para recordar el último de estos casos, te traemos parte de una entrevista con el Times de Los Angeles, en donde Moore externó su odio hacia Hollywood:
Para mí el cine moderno ha adoptado una forma que me parece abusiva. Nos impone sus elementos a la fuerza, por lo que destruye nuestra imaginación colectiva. Es como si fuéramos aves recién nacidas con la boca abierta, esperando a que Hollywood nos alimente con gusanos regurgitados. La película de Watchmen suena a eso, a gusanos regurgitados. Yo ya estoy harto de los gusanos. ¿Acaso no podemos tener algo diferente? Aunque fueran gusanos chinos, eso sería un buen cambio.
Hay unas tres o cuatro compañías editoriales que existen con el único propósito de crear guiones para películas en vez de hacer cómics. Quizás es cierto que ésta es la única razón por la que sigue existiendo la industria del cómic: para crear personajes para películas, así como juguetes y otro tipo de mercadotecnia. Los cómics son como un sembradío de franquicias que pueden resultar valiosos en un futuro para la industria del cine.
Comencé a trabajar en los cómics porque pensé que se trataba de un medio útil que no había sido explotado en todo su potencial. Will Eisner le dio un acercamiento cinemático a sus cómics en la década de los cuarenta, luego de ver Ciudadano Kane (1941) varias veces y transferir el estilo visual a las historias de The Spirit. A pesar de lo mucho que admiro a Eisner, creo que ese acercamiento últimamente ha perjudicado al medio en vez de beneficiarlo. Si consideras un cómic en relación a un filme, lo único que obtienes es una película que no se mueve, que no tiene música, y que carece del beneficio de tener a una estrella de cine en el papel protagónico.
Con Watchmen intenté contar la historia de los personajes a lo largo de varias décadas, utilizando distintas técnicas que se perderían al convertirse en película, como utilizar historias escritas sobre los personajes y otros recursos de metaficción. Me ofende la cantidad de dinero y recursos que se gastan en los proyectos hollywoodenses; toman una idea, la distorsionan, la hacen infantil, y luego gastan cien millones de dólares para ofrecerle a la gente un escape de sus denigrantes vidas en el trabajo. Es irrespetuoso y ofensivo. Ésta no es la cultura por la que yo trabajé.
Las campañas virales se han vuelto una parte fundamental de las grandes producciones de Hollywood, de manera que las cintas más esperadas del año se empiezan a promocionar con varios meses de anticipación, en donde las compañías productoras ofrecen una serie de adelantos, imágenes, pósters y hasta juguetes que van revelando la trama de la película. El caso de The Amazing Spider-Man es uno de los más extremos, y como prueba de ello te traemos este video con 25 minutos de material recopilatorio de la película: