La historia del punk capturada en filmes que retratan los lugares, los sonidos y los conceptos que unificaron a la juventud a lo largo de todo el Reino Unido, a mediados de los setenta.
Por supuesto encontrarán una ecléctica y desaforada lista que incluya lo mejor del cine gay (para él), algunas excentricidades y, también, uno que otro filme de las listas convencionales
Del 29 de septiembre al 1o de octubre, un fetival con causa que ofrece una ventana para los realizadores latinos de EEUU y para que se vean filmes latinoamericanos en EEUU, además de hacer industria en LA
Es este un iluminador, extremadamente raro documental que revisa de cerca el proceso creativo de uno de los más grandes autores de cine de nuestros tiempos.
Entonces disruptores, estos filmes han sido dejados muy por detrás en términos visuales por los galopantes avances tecnológicos, pero merecen ser recordados como mucho más que simples piezas de museo.
Si bien Mills ha confesado que la relación con su hijo sopló la inspiración central para el filme, también incidió en su construcción Alicia en las ciudades de Wim Wenders.
La revista británica que no solo ha decidido compartir los que considera fueron los mejores filmes del 2021 sino que, además, realizó un video a manera de supercut en el que integró escenas de los filmes elegidos.
ha colaborado con directores como Danny Boyle, Cameron Crowe, Spike Jonze, Luca Guadagnino, Jim Jarmusch, Bong Joon-ho, Lynne Ramsay, los hermanos Coen, David Fincher y, por supuesto, Wes Anderson.
Dos de los autores de cine fundamentales de los últimos 40 años. Uno alemán, el otro norteamericano. Ambos alimentados por la cultura popular, capaces de absorberla y transformarla en arte idiosincrácico.
Más allá de la anécdota de Friedrich Nietzsche recuperada por Béla Tarr, ¿de qué manera se conectan las preocupaciones del filósofo alemán con el filme del cineasta húngaro?
En su más reciente documental, Vaquero del mediodía (2019), el periodista, reportero, escritor y cineasta Diego Enrique Osorno emprende la búsqueda constante y apasionada de su amigo Samuel Noyola, poeta mexicano nacido en 1964 y desaparecido desde 2009.
El cine de Béla Tarr es un cine de repetición, de movimiento, de ritmo. De sonido y silencio, música y quietud. Podemos encontrar, en varias de sus películas, los mismos motivos visuales.