Diecisiete años después de que publicó El club de la pelea, Palahniuk anuncia que ha desempolvado a Tyler Durden y su Proyect Mayhem para trabajar en una secuela.
Partiendo de lo anterior, está claro que musicalizar un filme es una tarea totalmente distinta, una que Reznor se moría de ganas por experimentar, sobre todo si era bajo la dirección de David Fincher.
Por alguna u otra razón, varios de los actores más importantes que han participado en la saga del Universo Cinemático Marvel han hecho público su fastidio por este tipo de películas y se han negado a regresar.
La chica del dragón tatuado ya se llevó antes a la pantalla grande en Suecia. Mara declaró que la versión norteamericana es más bien una reinterpretación, y quiso darle una nueva dimensión a Lisbeth Salander.
Reznor admitió que el guión le pareció interesante desde un principio pero el problema que encontró para involucrarse en el proyecto fue lidiar consigo mismo, pues estaba cansado de un extenso tour con Nine Inch Nails.
Fincher ha adquirido un talento técnico excepcional. Quizás el caso más representativo sea La habitación del pánico. En este filme la cámara se mueve con soltura impresionante al tiempo que dibuja la estructura de la casa donde se desarrolla la historia.