El satírico adoctrinamiento a través de filosofías del bienestar en un internado ¿británico?; la única mujer que no perdió la cabeza a manos de Enrique VIII; y el infausto secuestro de un niño judío a manos del Vaticano en el siglo XIX.
Clara Sola retrata un mundo que pese a desarrollarse en la apertura del espacio y la riqueza de lo verde y lo fresco, es opresivo y asfixiante, una estampa con la que muchas personas, en muchos sitios de Latinoamérica claramente se pueden identificar.
Para distanciarse del filme de Tornatore, Nali invierte dedicación en la inventiva tanto de los sucesos narrativos, como de su imaginerio visual en Last Film Show
Taracena asume una narración que apela a la construcción de frases e imágenes que conjuran poesía como intentando que ella, con su belleza, sirva de bálsamo para sanar tanto dolor en este proceso de reconciliación guatemalteco.
La náusea y el coma diabético provocados por el desconcierto y la sobredosis de azúcar terminan por sepultar la crisis depresiva y existencial de un buen tipo, tremendamente atormentado.
Podemos constatar que, en el 2022, se siguen haciendo extraordinarios filmes, capaces de conmover, de hacernos pensar sobre la vida, sobre nuestra vida, sobre la vida de los demás.
Con Sanctorum (2019), Joshua Gil consigue ejemplificar la poética de la imagen, aquello que Walter Benjamin intentaba definir a partir de la búsqueda de una nueva conceptualización del arte donde la propuesta visual –y filosófica- no sólo se inclinara hacia la comprensión de un...
El filme está proyectado en clave de comedia romántica pero con la inteligencia e ingenio que le permiten trascender el género, gracias al guion de Trier y su habitual coguionista, Eskil Vogt
Writing With Fire estimonia la gallardía de unas mujeres habituadas a padecer injusticias que defienden su dignidad como personas, desde el riesgo y una humildad que les permite prepararse, cuestionarse cotidianamente para solo así evolucionar y estar a la altura del desafío que ellas mismas se han impuesto.
No es fácil cargar con el peso de las revelaciones que son inaccesibles para los demás. Aunque desde el plano místico que lo plantea Apichatpong, queda claro que es apenas desde el sosiego que se consigue al arribar a ese punto, que todo, absolutamente todo, comienza a adquirir nuevos significados.
Esta lista intenta reposicionar a la mujer en la historia del cine, rescatando y abogando por 100 gemas escondidas dirigidas por mujeres que han sido olvidadas o injustamente desdeñadas, con contribuciones de autoras como Jane Campion, Greta Gerwig, Claire Denis, Isabelle Huppert, Agnès Varda, Tilda Swinton.
Debajo de una atractiva iluminación (como de restaurante caro), de interpretaciones actorales comprometidas con la trama y de una puesta en escena efectista, se encuentran trampas hábilmente situadas para el espectador.
Martel creó THE PASSAGE, una instalación cinematográfica que explora las fronteras de su propia obra y el arte del filme, trabajando con imágenes calientes, reflejos y presencias espectrales misteriosas.
Lo que hace Reyes es, con un desplante de vistoso ingenio, sensibilidad y mucho tacto, fundir la ficción con la realidad, al tiempo que entrelaza el pasado con el presente.
Desde FishTank de Andrea Arnold (a quien parece dedicarle algunos guiños) podemos encontrar muy pocos filmes que penetren con tanto decoro, tanta sensibilidad y también tanta cariñosa ternura, el dolor y el enojo afincado dentro del cuerpo y el alma de los adolescentes.
Parece que ha llegado el momento de la justicia. El expresidente de Guatemala, Enrique Monteverde (Julio Díaz), militar en retiro, es llevado a juicio acusado de genocidio.
A morir en los desiertos es un filme de la española Marta Ferrer que sin alarmismo, desde la serenidad, nos muestra un pedazo de mundo, en México, en peligro de extinción.
Cuando era niña, Colette luchó contra los nazis junto a su familia como miembros de la Resistencia francesa. Ahora, la mujer ha pasado toda su vida tratando de olvidar los terrores por los que pasaron.