Después de un recital, el talentoso pianista Paul Orlac (Conrad Veidt) sufre un terrible accidente de tren que deja al músico con el cráneo roto y las dos manos destrozadas. Yvonne (Alexandra Sorina), su esposa, le explica al doctor Serral (Hans Homma) lo importantes que son las manos para su marido. Después de algunos...
“Cuando vi la noticia en la televisión, noté que estaba siendo manejada como una cuestión política, en la que se mostraba a Oscar como un hombre que merecía su muerte."