No es Bardo (o falsa crónica de unas cuantas verdades) ni la obra maestra que algunos quieren postular, ni el fiasco rotundo que otros desean sentenciar. Bardo conjura momentos geniales, otros de honda profundidad y unos más de una autocomplacencia feroz.
Si bien Mills ha confesado que la relación con su hijo sopló la inspiración central para el filme, también incidió en su construcción Alicia en las ciudades de Wim Wenders.
Writing With Fire estimonia la gallardía de unas mujeres habituadas a padecer injusticias que defienden su dignidad como personas, desde el riesgo y una humildad que les permite prepararse, cuestionarse cotidianamente para solo así evolucionar y estar a la altura del desafío que ellas mismas se han impuesto.
No es fácil cargar con el peso de las revelaciones que son inaccesibles para los demás. Aunque desde el plano místico que lo plantea Apichatpong, queda claro que es apenas desde el sosiego que se consigue al arribar a ese punto, que todo, absolutamente todo, comienza a adquirir nuevos significados.
Lo que hace Reyes es, con un desplante de vistoso ingenio, sensibilidad y mucho tacto, fundir la ficción con la realidad, al tiempo que entrelaza el pasado con el presente.
Desde FishTank de Andrea Arnold (a quien parece dedicarle algunos guiños) podemos encontrar muy pocos filmes que penetren con tanto decoro, tanta sensibilidad y también tanta cariñosa ternura, el dolor y el enojo afincado dentro del cuerpo y el alma de los adolescentes.
La Gira de Documentales ha iniciado en Oaxaca la semana pasada, contínua esta semana en Veracruz y, después de Aguascalientes y Michoacán, llegará a Ciudad de México del 1 al 5 de diciembre.
¿Qué pasará con las mujeres? Pero, sobre todo, ¿qué ocurrirá con las niñas, con las jovencitas, en esas regiones de México donde han sido abandonadas y desamparadas?
A morir en los desiertos es un filme de la española Marta Ferrer que sin alarmismo, desde la serenidad, nos muestra un pedazo de mundo, en México, en peligro de extinción.
Un hombre lleno de complejos y resentimientos, subyugando al pueblo con base en cadenas incesantes de mentiras, de construir una realidad paralela que colisiona con la objetiva, utilizando los medios que sean necesarios con tal de preservar el control absoluto de la situación y endureciendo las formas y los discursos cuando se descuadra,...
Lo que presenta Michel Franco es una visión apocalíptica, pero de un apocalipsis que cada vez parece más familiar. Es el llevar al extremo la perturbadora agitación social que se vive en el mundo actual si bien, por desgracia, el desenlace no se vea ni se sienta tan lejano.
Este año, los premios del festival se colocaron en manos de la audiencia que reconoció «Another Round», del danés Thomas Vinterberg, como la mejor película.
"El verdadero horror proviene de la familia misma. Una de las escenas más aterradoras de la película es la cena con poca luz, que no tiene elementos ocultos y se basa únicamente en la actuación explosiva de Toni Collette", señala el cineasta surcoreano.
La lista de icónicos cinefotógrafos que han usado esta cámara ha crecido exponencialmente: Roger Deakins, Emmanuel Lubezki, Rodrigo Prieto y Hoyte van Hoytema, entre otros.
La idea de hacer ensayos visuales con tan estrictas limitaciones de tiempo y espacio resulta un fuerte incentivo para la imaginación. Ciertamente puede abrir un espacio para la crítica videográfica que sea menos explicativa y más gestural, menos lineal y más iterativa, menos acerca de analizar filmes y más...
A finales del siglo XIX en la región de Nueva Inglaterra, un viejo y gruñón marinero, Thomas Wake (Willem Dafoe), y su nuevo subordinado, Ephraim Winslow (Robert Pattinson), desembarcan en una remota franja de tierra rodeada de aguas tormentosas e intensa neblina. Son relegados durante cuatro semanas hasta la llegada del ferri...
No importa lo que Jim Jarmusch intente, es imposible que sus trabajos carezcan de la gracia, la chispa, y el recubrimiento filosófico y humanista que le son idiosincrásicos. Incluso cuando estira un poco de más la liga, como es en el caso de The Dead Don’t Die.
Scorsese, como cualquier persona en el crepúsculo de su vida, claramente también tiene sus asuntos que resolver consigo mismo, con los suyos, con su religión y su Dios, de los que tomó su distancia durante algún tiempo y, expresamente, quien de niño fue monagillo y quiso ser sacerdote, confesó...