Mientras un tren en movimiento -particularmente uno que se dispone a entrar a un tunel- largamante ha simbolizado al sexo, las estaciones de tren han hospedado historias de frustración sexual.
Un buen libro a la hora de acostarse despierta la imaginación de los niños pequeños, pero no es fácil trasladar la magia de las páginas a la pantalla cinematográfica.