Función en OaxacaCine (Oaxaca): martes 29 de octubre, 7pm.
El conmovedor retrato del director francés, Bruno Dumont (La vie de Jésus, 1997), Camille Claudel 1915 se centra en el invierno de 1915, cuando la escultora francesa, Camille Claudel es internada por su familia en el manicomio de Montdevergues, en el sur de Francia, lugar en el que esperará la llegada de su hermano Paul Claude, célebre diplomático y poeta francés. Claudel es interpretada por la actriz Juliette Binoche, quien muestra a una frágil mujer llevada al límite y a la que solo su desbordada necesidad de creación artística la hará soportar las tribulaciones del encierro.
Con Camille Claudel 1915, Bruno Dumont deja de lado, en cierta medida, el incesante acercamiento a lo inexpresable (Hadewijch, 2009; Hors Satán, 2011) que sugiere cierto misticismo como principio rector de su visión del cine para, en su lugar, inyectar a su filme de austeras puestas en escena que retienen las expresión de emociones psicológicamente motivadas por el encierro y los recuerdos –por ejemplo, las lágrimas durante el ensayo de la obra de teatro que Camille observa- y que funcionan como un antídoto para la desbordante paranoia de su protagonista. Dumont filma los cuerpos en relación con los espacios y los otros cuerpos, el naufragio de Camille se expresa, por ejemplo, en sus gestos que son celda cuando la visita de su hermano, Paul -que previamente ha sufrido una metamorfosis provocada por la lectura de Rimbaud y sus propias obsesiones religiosas y que hace parecer a su hermana aún mas fuera de sus estribos- no cambia el panorama de su prisión corporal y creativa.
El retrato de una situación desesperanzadora en Camille Claudel 1915permite que el trabajo de Binoche y el estilo cinematográfico de Dumont, que aboga por la escasez de medios –en una relación con el cine casi de aspecto humilde-, los cortes elípticos y los cierres estáticos den la cara por la trascendencia artística que Camille Claude pudo extraviar en la ignominia de la locura.
JAR (@franzkie_)