El inmigrante (The Inmigrant) se exhibió por primera vez en junio de 1917. Durante ese tiempo Charles Chaplin produjo sus mejores comedias cortas como una serie para la Mutual Film Corporation. Este cortometraje fue el número once en su serie de doce comedias para aquella productora. Un tiempo en que las demandas de Chaplin eran de tal perfección que para su realización se utilizaron 90 mil pies de negativos mientras él pasó cuatro días y cuatro noches sin descansar mientras reducía a El inmigrante a su duración final. En este trabajo Chaplin se muestra genial y nos conmueve especialmente cuando nos presenta en pantalla las difíciles condiciones de vida de la gente humilde de su generación. Sirviéndose de su vena humorística, Chaplin exhibe la humillación y la brutalidad con la que los agentes del orden norteamericanos tratan a estas personas durante la larga travesía marítima.
El filme está estructurado en dos partes. En la primera, las escenas despliegan un barco cargado de inmigrantes europeos que viaja a Estados Unidos en busca de un futuro mejor. Pero durante el viaje son maltratados por los oficiales estadounidenses. Mientras tanto, Charlot se pasa el tiempo jugando a las cartas y ganando algo de dinero que consigue valiéndose de artimañas y amenazas contra un mal perdedor. Segundos después conoce a una joven y su madre enferma, conmovido por la situación, deposita en el bolsillo de la muchacha, sin que ella se dé cuenta, unos cuantos billetes, dando lugar a un malentendido, ya que un vigilante del barco piensa que le está robando a la chica. En la segunda, tiene lugar el arribo al país del norte y vemos a un Charlot que trata de sobrevivir en el nuevo terruño. Se encuentra una moneda y se dirige a un restaurante para calmar el apetito. Allí se reencuentra con la joven del barco quien viste de luto pues ya ha perdido a su madre. Feliz de volver a verla la invita a comer, pero no cuenta con que el dinero se le ha caído del bolsillo por lo que deberá pasar una serie de dificultades para poder pagar la cuenta.
VSM (@SofiaSanmarin)