¿Se puede pasar completamente desapercibido durante un día?
Con esta premisa el director Gustavo Taretto nos regala su cuarto cortometraje de manufactura impecable y con una historia de amor basada en la belleza del ritmo, la composición y la arquitectura de su ciudad natal, Buenos Aires. En este trabajo, como en su largometraje Medianeras (2011), el juego y uso de la arquitectura y sus espacios es vital para imponer el tono en la tan peculiar historia de un joven que disfruta de hacerse uno con su entorno urbano y pasar desapercibido.
JOY (@Come_Sesos)