El debut como directora de la actriz Eleonore Pourriat es este cortometraje de 11 minutos, Mayoría oprimida, escrito en tono sardónico, sobre un hombre que experimenta sexismo en un mundo dominado por las mujeres. Al invertir los papeles sociales, poniendo a los hombres como los oprimidos y a las mujeres como las opresoras, resalta sensaciones y verdades que no son fáciles de transmitir en el discurso.
Mayoría oprimida, además de ser un trabajo divertido e ingenioso, puede ser un puente para transmitir la impotencia con la que lidiamos las mujeres al ser no solo victimizadas, sino revictimizadas y resonsabilizadas por las acciones de los agresores. La desigualdad moral, el sexismo totalmente normalizado con la que vivimos brinca como absurdo en este trabajo.