Por Beatriz Ladrón de Guevara

Ellos son deportistas que entregan su espíritu en el campo cada que salen a competir. Quieren ser los mejores del mundo y dejar el nombre de su país muy en alto. Ellos son la selección nacional de cricket de Afganistán. Out of Ashes, un documental inglés, que logra entrar por un pequeño espacio de un país devastado y desgastado por la guerra y los constantes discursos políticos y de intereses acumulados en esta región, en donde las cifras de muerte de civiles son alarmantes, nada más en los primeros meses de 2011 suman más de 1400, para contar la vida no de terroristas desalmados, ni de árabes machistas, sino la de un grupo de hombres que se entregan en cuerpo y alma al sueño que anhelan cumplir: ganar la Copa del Mundo del Cricket. Taj Malik es el hombre responsable de infundir el interés, sino es que amor y razón de ser, a estos jugadores. Empieza por sus dos hermanos Hasti y Karim, a los que guia y dirige desde pequeños en un campo de refugiados en Pakistán, hasta convertirlos en una Selección Nacional. “Las personas le decían a nuestros padres que éramos pandilleros; jugábamos desde que amanecía hasta que anochecía; éramos unos inútiles para los demás”, así lo narra uno de los hermanos de Taj.

Con una narrativa que bien se acerca al cine de ficción por la enorme tensión dramática y emotiva que guarda, Out of the Ashes cuenta una muy afortunada historia que se adentra a la vida de este equipo de hombres, padres de familia, hijos, amigos y hermanos, para revelarnos sus anhelos y motivaciones alojadas en un bate y una pelota. Este documental plasma la visión y entrega de sus tres realizadores, bajo el apoyo del director y productor Sam Mendes, un gran aficionado al cricket: Tim Albone (ex corresponsal de Afganistán para el Times y The Sunday Times), Lucy Martens (directora del premiado documental Voices from Inside – Israelis Speak), Leslie Knott (periodista con una larga experiencia en Afganistán). Desde 2008, se vuelven parte del equipo para seguirlo en un largo trayecto, registrando sus más grandes triunfos y derrotas en todo el mundo en busca de un sueño. El viaje comienza en un campo de entrenamiento que más bien parece un pedazo de tierra y piedra sin dueño. Su empeño los lleva a vencer nada más y nada menos que a los padres del cricket, en Jersey, Inglaterra, saltar el gran charco y encontrarse con el erotismo de la bella Argentina, que sorprende a más de uno por los ligeros atuendos de las mujeres, hasta disfrutar un momento de libertad y olvido en Tanzania, donde el equipo se lanza al mar por primera vez en una bella playa. Este equipo de héroes, olvidados por su país, de pronto se convierte en la voz de ese otro Afganistán que al mundo comienza a interesar y conmover.