Aquí puedes ver nuestra Entrevista con Apichatpong Weerasethakul (México)
Aquí puedes ver nuestra Entrevista con Apichatpong Weerasethakul (Londres)
Apichatpong Weerasethakul nos responde, para él, ¿Qué es el cine?
En un pequeño hospital de la provincia de Khon Kaen, de la que el director tailandés Apichatpong Weerasethakul es oriundo, un grupo de soldados padece una inexplicada enfermedad que los hace pasar dormidos buena parte del día. Jen (Jenjira Pongpas Widner) es una señora que cuida a los durmientes y poco a poco desarrolla un profundo lazo con uno de ellos, Itt (Banlop Lomnoi). A través de los esporádicos despertares del joven Itt, y del encuentro de Jen con otros personajes como dos lozanas y bellas diosas a las que les reza en un altar, y una médium, también asidua al hospital, Cementerio de esplendor va añadiendo capas de significado y realidad a lo que se muestra en pantalla: el hospital fue montado sobre un antiguo cementerio de reyes que se alimentan de la energía de los soldados para seguir luchando, por ejemplo. Con los hechos históricos se mezclan las vidas de los personajes hasta un punto en el que la visión de Jen traspasa las fronteras del tiempo y de lo material, y entonces logra deambular por los sueños de Itt.
Con un trato torpe, la mística trama de Apichatpong (ganador de la Palma de Oro a Mejor Película en Cannes 2010 por El tío Bonmee recuerda sus vidas pasadas) podría verse neohippie, new age o, peor, tan ridícula como las de algunos blockbusters de verano. Pero el bordado de Cementerio de esplendor está compuesto por materiales locales, totalmente orgánicos, y fue tejido con técnicas artesanales. La naturalidad y la auténtica espiritualidad con la que está armada –con la rítmica edición, los pocos movimientos de cámara, la excelente actuación de la habitual del director, Jenjira Pongpas–, le dan a la obra un ritmo de largos respiros que buscan sumergir al espectador en una completa y compleja –y a la vez sencilla– experiencia cinematográfica. Y aunque Cementerio de esplendor lidia con violentos episodios de la historia de Tailandia y con algunas de las heridas que dejó el reciente golpe de Estado de 2014, la atmósfera final es de aceptación, curiosidad, búsqueda, pasión por lo vivido y conexión con el otro. Este bello filme tropical, estrenado en Cannes, observa al ser humano en su complejidad, y, sin hacer a un lado sus fallas, le da esperanza e inspiración.
Fecha de estreno en México: 19 de agosto, 2016.
Consulta los horarios en: Cinépolis, Cinemex, Cineteca Nacional