Más allá del convencional filme deportivo o una extensa biopic sobre las proezas y hazañas del ídolo, The Program (2015), el más reciente filme del cineasta británico, Stephen Frears (The Queen, 2006; Philomena, 2013), es el relato de una tragedia americana moderna sobre trampas y engaños que se basa en Lance Armstrong (Ben Foster), el ciclista ganador siete veces de la Tour de Francia, y la manera en que se convirtió en el arquitecto del programa de dopaje más sofisticado, profesionalizado y exitoso que ha existido en la historia del deporte. La película retrata a un hombre que, aprovechándose de su loable lucha contra el cáncer, se condujo con astucia para ganar millones de dólares en competencias deportivas, contratos con patrocinadores y su fundación. Frears se aproxima al atleta caído en desgracia, al hombre que, mintiéndose a sí mismo, abandonó su integridad y se arropó en la sed de fama y fortuna. Pero más allá del retrato del deportista, el cineasta británico pisa nuevos terrenos al elaborar una exposición precisa sobre los mecanismos del programa de dopaje instaurado por Armstrong y aplicado a sus compañeros de equipo por el médico deportivo, Michele Ferrari (Guillaume Canet). Inspirado en Seven Deadly Sins, del periodista irlandés David Walsh, el guión de John Hodge(Trainspotting, 1996; Trance, 2013) muestra ampliamente la preparación del cóctel de esteroides, las dosis exactas y los tiempos precisos de consumo para no dejar huella del crimen perfecto.
LFG (@luisfer_crimi)
Consulta los horarios en: Cinemex
Fecha de estreno en México: 5 de agosto, 2016.