Un grupo de cuatro jóvenes británicos maneja un negocio fraudulento en el que manipulan personas a cambio de los datos de su tarjeta de crédito y, de esta forma, poder pagar sus colegiaturas. Accidentalmente, le roban a un sádico gánster alemán que los amenaza con matarlos a menos de que logren juntar 2 millones de euros. El grupo, liderado por Sam (Ed Speleers), viajará entonces a Miami para llevar a cabo un elaborado robo de diamantes que saldará su deuda.
Basada en una historia real, Los estafadores (Plastic, 2014) intenta ser una comedia de acción y crimen al estilo de Catch Me If You Can (2002) de Steven Spielberg, pero sin lograrlo. Julian Gilbey, conocido por su filme del 2011, A Lonely Place to Die, se embarca aquí como director y uno de los guionistas del filme británico que no sólo es aburrido –con una trama que dedica más tiempo del necesario a las discusiones necias entre los protagonistas–, sino que termina objetivando a las mujeres con desnudos innecesarios, y transforma a Frankie (Emma Rigby), la última en unirse al grupo de estafadores, de una valiosa aliada a un accesorio del líder del grupo y damisela en peligro.
Fecha de estreno en México: 21 de enero, 2016.