Basada en la novela homónima de Gillian Flynn (Gone Girl, 2012), Lugares oscuros (Dark Places, 2015) de Gilles Paquet-Brenner (Sarah’s Key, 2010), sigue el día a día de Libby (Charlize Theron), una mujer de 33 años, única sobreviviente de una masacre de la que fue testigo cuando tenía ocho años, y que provocó la muerte de su madre y hermanas. La tragedia ocurrió en un pueblo agrícola en Kansas, un lugar en el que prevaleció la idea de que los asesinatos fueron parte de un culto satánico. Los recuerdos borrosos y traumáticos que tiene de aquella noche de 1985, le revelan que su hermano Ben, un adolescente de 15 años, fue el responsable del crimen. El asesino, como demuestra el testimonio de Libby, fue su hermano, a quien se le relacionó con grupos satánicos. Con el paso de los años, Libby se ha convertido en una especie de celebridad, un personaje que ha sacado provecho de su desgracia, vendiendo su historia a los medios de comunicación, publicando libros que repasan una y otra vez las circunstancias de su tragedia. 25 años después, Libby se enfrenta a problemas financieros, ya no le queda capital de las donaciones recibidas durante su infancia, y acepta el dinero de una sociedad secreta, el Kill Club, conformada por un grupo de investigadores amateurs —encabezado por Lyle Wirth (Nicholas Hoult)–, dedicados a desentrañar los misterios de asesinatos no resueltos. El verdadero argumento de la historia comienza cuando Libby, debe, una vez más, repasar los recuerdos de su infancia que la llevarán a dudar del testimonió que emitió cuando era una niña.

El director Paquet-Brenner tiene la intención de contarnos un interesantísimo thriller, pero se queda en un drama con elementos de suspense. El conflicto se vislumbra mediante un buen puñado de flashbacks que se remontan a la juventud de Libby y a los años tras su pérdida, y en la búsqueda por desentrañar las circunstancias oscuras del crimen, se traza un mapa confuso de recuerdos, en los que se contrastan dudas y reproches que se van sucediendo progresivamente entre el pasado y el presente, y viceversa; esta serie de flahsbacks funciona como la principal herramienta de investigación de la película y no la investigación misma, una que debería transmitirnos los detalles y referencias del asesinato. En este aspecto es donde Gilles Paquet-Brenner patina, debido a un relato difuso y un planteamiento algo intrascendente con secuencias y diálogos forzados que resultan poco convincentes. Plantea por lo tanto un muy lineal y causal mundo interior de la protagonista. No hay locura dentro de la mente de Libby, todo está calculado, todo tiene cierto sentido. Por suerte, la línea argumental principal se muestra poco dubitativa y logra mantener el interés durante casi toda la película, obviando las consecuencias del contexto. Digno de mención, son las interpretaciones de Charlize Theron, Chloë Grace Moretz, como la adolescente adoradora de satanás, y Christina Hendricks, quienes aparecen en la historia como parte del pasado de Libby. Lugares oscuros resulta pobre, con una narrativa rígida, necesitada de un ritmo que nos contagie la infelicidad y la turbulencia de su enervada protagonista.

VSM (@SofiaSanmarin)

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Fecha de estreno en México: 5 de junio