Considerado como uno de los más grandes boxeadores de todos los tiempos, el panameño Roberto Durán (Edgar Ramírez) se ganó el apodo de “Manos de piedra” debido a los puñetazos tan efectivos y potentes que impregnaba en los cuerpos de sus oponentes cada vez que se subía al cuadrilátero. La biopic traza los pasos del panameño desde su infancia, pasando por su debut profesional en 1968, a los 16 años de edad, hasta su retiro en 2002, a la edad de 50. Uno de los sucesos centrales de la trama es el combate contra Sugar Ray Leonard (Usher Raymond) donde estaba en disputa el título de peso welter del CMB.
El director Jonathan Jakubowicz recurre al uso de flashbacks para que el relato se encuentre en un ir y venir constante entre pasado y presente. Si bien es cierto que se muestra el contexto histórico en el que creció Durán (las fuerzas de ocupación de Estados Unidos en la zona del Canal de Panamá), el director está más preocupado en proporcionar el retrato de un luchador que siente un profundo resentimiento contra el imperialismo norteamericano al grado de aceptar a regañadientes al visionario Ray Arcel (Robert De Niro) como su entrenador. Aunque el filme posee todos los ingredientes del drama boxístico, la edición no corresponde a la de un atractivo ensamblaje y sólo ofrece un conjunto de imágenes irregulares que no logran establecer el progreso de las peleas ni las estrategias empleadas por los boxeadores.
Consulta horarios en: Cinépolis, Cinemex
Fecha de estreno en México: 11 de noviembre, 2016.