En un mundo futuro destruido por la guerra, la civilización se ha refugiado en enormes zonas en movimiento que deambulan por la Tierra, encontrando naciones enteras rodando a lo largo de los continentes, con ciudades depredadoras como Londres que engullen comunidades callejeras en busca de combustible y bienes. Thaddeus (Hugo Weaving) es un famoso líder en Londres, que mantiene la paz mientras busca “tecnología antigua”, que representa la cara del futuro mientras los ciudadanos trabajan y juegan en la metrópolis. Pronto será blanco de muerte por Hester (Hera Hilmar), una peligrosa fugitiva, pero el intento de asesinato se ve frustrado por Tom (Robert Sheehan), quien es leal a Londres. No obstante, este último es expulsado del territorio por Thaddeus, así que decide unirse a Hester en las desoladas tierras. Mientras cruzan el despiadado terreno, Tom y Hester se conocen, y el primero comprenderá más de una razón para unirse a la segunda en contra Thaddeus. Por si eso no fuera suficiente, ambos se enfrentan a la presión de Shrike (Stephen Lang), un ciborg que está persiguiendo y cazando a los rebeldes.

Basado en el libro de Philip Reeve, Máquinas mortales (Mortal Engines, 2018) ofrece una aventura al estilo steampunk que evoca a un mundo especializado de hombres y máquinas que se convierten en sobrevivientes en una tierra agonizante. Las primeras imágenes del filme muestran el inmenso tamaño y la pura ferocidad de las ciudades depredadoras, con Londres mostrando su poder mientras persigue una máquina más pequeña de Bélgica, con Hester a bordo, esperando su oportunidad de caer en el vientre de la bestia y asesinar a Thaddeus. La apertura de Máquinas mortales es una secuencia que se recicla a lo largo del relato, evidenciando la nula creatividad del director Christian Rivers, quien se esfuerza por asegurarse de que la gran escala de la película siga siendo su estrella principal, mostrando la velocidad y enormidad de Londres con tomas panorámicas de la actividad comunitaria. El filme intenta sorprender a los espectadores con ciudades en movimiento, máquinas voladoras y una trama centrada en el contenido de un cuadro misterioso. Pero más allá de las ciudades móviles sobre ruedas que recorren el apocalipsis, únicamente hay gran cantidad de CGI, actuaciones poco convincentes, argumentos narrativos desorganizados, trayectos aletargados y misiones predecibles.

Fecha de estreno en México: 1 de enero, 2019.

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