Después de un accidente traumático, Christine (Nicole Kidman) se despierta cada mañana sin recordar los sucesos del día anterior. Con el miedo de vivir sin memoria y ante la desesperación de no saber quién es, ella intenta juntar las piezas de su pasado para descubrir las verdades asociadas a ella y a su marido, Ben (Colin Firth). En Memento (2000), de Christopher Nolan, Guy Pearce interpretó a un hombre que utilizaba notas en post-it, polaroids y otras pistas visuales para superar su pérdida de la memoria con la intención de encontrar la verdad detrás de un asesinato. En este caso, el personaje de Kidman también busca, con la ayuda de un médico, el doctor Nasch (Mark Strong), descifrar la verdad detrás de un crimen asociado a su pasado e intenta manejar la condición en la que vive utilizando una videocámara para crear un diario audiovisual que le permita otorgarle cierta continuidad y no partir de cero cada día.
Basado en la novela bestseller de S.J. Watson, Before I Go to Sleep (No confíes en nadie, 2014) es un thriller psicológico dirigido por Rowan Joffe (Brighton Rock, 2010) que posee algunos momentos de efectiva tensión debido a la atmósfera angustiante y caótica que genera la protagonista. Sin embargo, el filme no logra suspender nuestra incredulidad el tiempo suficiente para que el rompecabezas narrativo y el tratamiento del tema de la amnesia resulten creíbles. Algunas respuestas son reveladas con misterio y cautela, pero en el último tramo de la película, las soluciones se perciben incongruentes, apresuradas y predecibles. Visualmente, el director opta por un exagerado uso de primeros planos, mientras que las voces de los personajes –en más de una ocasión– relatan los mismos sucesos que vemos en pantalla volviéndose no sólo repetitivo, sino reiterativo.
LFG (@luisfer_crimi)
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Fecha de estreno en México: 6 de marzo, 2015.