En la isla de Plymouth, Baker (Matthew McConaughey) atraviesa una mala racha económica; está luchando para llegar a fin de mes con su propio barco de pesca, el ‘Serenity’, perdiendo clientes mientras busca obsesivamente un atún gigantesco que constantemente elude la captura. Incapaz de pagar a su leal empleado Duke (Djimon Hounsou), Baker se prostituye con Constance (Diane Lane), una mujer mayor que aprecia la atención. Bebiendo en exceso, Baker se sorprende por el regreso de Karen (Anne Hathaway), su novia de la adolescencia y exesposa, quien actualmente sufre una serie de maltratos físicos y psicológicos cometidos por su esposo, Frank (Jason Clarke). Karen le ofrece a Baker 10 millones de dólares a cambio de asesinar a Frank durante una excursión de pesca, lo que deja al hombre en una posición preocupante.
El intenso azul del mar, el extenuante calor de la playa, el radiante sol de la costa y la húmeda lluvia nocturna hacen que Obsesión (Serenity, 2018) inicialmente exista en un mundo reconocible, con el director y guionista Steven Knight construyendo su postura sobre comportamientos humanos y el grado de desesperación al que puede llegar el individuo en condiciones extremas en un escenario que recuerda al ‘floridian noir’ -aquellas novelas policiacas y criminales situadas en el soleado estado del sur de EE. UU.-. La oferta de Karen a Baker es el punto de inflexión que arroja al protagonista en un limbo de tentaciones y dilemas morales. La propuesta es severa; difícil de rechazar, pero sin los argumentos suficientes para aceptar, hasta que la astuta Karen coloca al hijo que tuvo con Baker, Patrick (Rafael Sayegh), en la fórmula para convencerlo de asesinar a Frank. Recordando su maestría con la que tejió la red de intrigas en Eastern Promises (2007) y organizó Locke (2013) en una sola locación al interior de un automóvil, Knight difunde la inquietud entre varios personajes, mostrándose esquivo para no revelar tantos detalles en un principio. Sin embargo, el control sobre su relato -aparentemente estructurado y cronometrado- se le escapa justo en el momento en que comienza a vislumbrarse una presencia que supera la realidad de Baker y que tiene que ver con un gran ojo capaz de ver y manipular los acontecimientos en Plymouth. El recurso puede calificarse de original, ambicioso y atractivo, pero no se conecta de manera arriesgada y congruente con los acontecimientos previos y, peor aún, nunca logra hacer las revelaciones importantes que tanto prometía. Una conexión psíquica entre Baker y su hijo es fuertemente insinuada, todos los isleños parecen saber algo sobre el plan supuestamente secreto para matar a Frank, y un hombre con traje y gafas aparece en una misión para darle a Baker un dispositivo de búsqueda de peces. ¿Acaso el protagonista está teniendo una crisis mental? ¿La bebida finalmente le afectó el cerebro? ¿O hay algo sobrenatural pasando? El propio Baker se pregunta eso y más en un monólogo aparentemente existencialista, pero absurdo e irrisorio.
Fecha de estreno en México: 1 de marzo, 2019.
Consulta horarios en: Cinépolis, Cinemex