Ben Whittaker (Robert De Niro) es un jubilado de 70 años que, tras haberse quedado viudo, se encuentra inmerso en una rutina que lo aburre. En cuanto ve un anuncio en el que una empresa solicita adultos mayores como pasantes, decide probar suerte para darle un giro a su vida. La empresa en cuestión resulta ser una tienda de ropa por internet, ubicada en el mismo edificio en el que Ben trabajó durante casi toda su vida para una compañía que hacía directorios telefónicos. Luego de pasar todos los filtros de selección y de ganarse la simpatía del joven equipo de trabajo de la empresa, Ben se convierte en el asistente de Jules Ostin (Anne Hathaway), la joven emprendedora a quien se le ocurrió fundar la tienda y que ha visto cómo su negocio ha crecido a un ritmo vertiginoso, gracias, en buena medida, a que ella supervisa hasta el más mínimo detalle. Poco a poco Ben se irá ganando la confianza de Jules y se convertirá en un valioso apoyo para ella, aconsejándola con la sabiduría de la experiencia y ayudándola a conseguir un equilibrio entre su trabajo al frente de la empresa y su vida familiar, que no atraviesa por su mejor momento desde que Jules empezó a pasar cada vez menos tiempo con Matt (Anders Holm), su marido dedicado al hogar, y su pequeña hija Paige (Jojo Kushner).
La directora y guionista Nancy Meyers (What Women Want, 2000; It’s Complicated, 2009) reúne en este filme los elementos suficientes para crear una comedia ligera que, a la vez de ofrecerle al espectador un buen rato de humor y entretenimiento, aborda al menos dos cuestiones dignas de reflexión en nuestra sociedad actual: por un lado el culto a la juventud y a lo nuevo, y, por otro, el culto al trabajo y al éxito económico. En este sentido, el personaje de Ben Whittaker, interpretado por De Niro con una acertada combinación de vitalismo y sabia mesura, reivindica la importancia de la experiencia de vida y de algunos valores tradicionales –no necesariamente conservadores– que el mundo de hoy –tan ávido de novedades– tiende a menospreciar considerándolos lastres anacrónicos para la modernidad. Así, Ben se convierte en una especie de figura paterna para la impetuosa pero confundida Jules –encarnada por Anne Hathaway con una actuación solvente–, cuyos padres, no por casualidad, son figuras prácticamente ausentes en la historia. La visión de vida de su veterano pasante, le abre los ojos a la joven empresaria para que se percate de la importancia de la familia y le conceda el valor debido a su vida personal. Pasante de moda privilegia un tono cómico amable y familiar –con alguna escena demasiado simpe y trillada–, evita las reflexiones demasiado densas y se conforma con dar una solución demasiado fácil y naif al conflicto de la trama.
Fecha de estreno en México: 1 de octubre, 2015.