John Ronald Reuel Tolkien (Nicholas Hoult) creció en la Inglaterra rural con su hermano, pero cuando los tiempos se tornan difíciles, su madre se ve obligada a reubicar a sus hijos en el duro mundo industrial de Londres. Cuando su padre muere prematuramente, John queda bajo la tutela del padre Francis (Colm Meaney), quien lo envía a vivir con un guardián afluente que también ofrece refugio a Edith (Lily Collins), una joven pianista. En la vida de John aparecen Geoffrey (Anthony Boyle), Christopher (Tom Glynn-Carney) y Robert (Patrick Gibson), tres amigos que le brindan un descanso de la pesadez de la vida y que se convierten en un soporte para que el joven llegue a la universidad de Oxford. Con el tiempo, John se enamora de Edith, pero le resulta difícil comprometerse con un acto de fe de esa índole, y su atención se centra en búsquedas de fantasía, incluida la creación de un lenguaje especial. Sin embargo, toda la esperanza se pierde cuando estalla la Primera Guerra Mundial, colocando a John en complejos momentos de sobrevivencia, con su imaginación convirtiendo el trauma del campo de batalla en un catálogo de monstruos y dragones.
Después de la tarea titánica de Peter Jackson por trasladar la saga de El señor de los anillos a la pantalla grande, el cineasta Dome Karukoski (Tom of Finland, 2017) busca la fuente de toda la magia de fantasía con Tolkien (2019), una biopic sobre el famoso creador de la Tierra Media, J.R.R. Tolkien. En lugar sumergirse en las dinámicas y los tropos de la fantasía que convirtió al inglés en un nombre familiar, el filme intenta seguir siendo un evento emocional al estudiar cómo las pequeñas ideas de una mente brillante se convierten en páginas icónicas llenas de criaturas, búsquedas y desgarradores actos de supervivencia. El guion de David Gleeson y Stephen Beresford es la exploración de una serie de adversidades, que comienza con la muerte de la madre de John hasta la imposibilidad de encontrar un espacio para la satisfacción espiritual. Parte de esta lucha personal tiene lugar dentro de la mente de John, con su visión de la naturaleza y la poesía que influye en su impulso creativo, que eventualmente se manifiesta en el ensamblaje de un lenguaje especial, jugando con las palabras y su potencial. Otra parte del relato está dedicado a la amistad, reuniéndose con chicos de ideas afines para hablar sobre literatura, beber alcohol y participar en algunas travesuras y aventuras. Dicha camaradería es vital para que John resguarde los conceptos de comunidad y defina su sentido del honor, temas esenciales de su obra literaria. La incapacidad de John para llegar a un acuerdo con sus sentimientos se transmite a lo largo de la película; y es ahí, en las pretensiones del guion por confeccionar una historia de amor, cuando la narrativa comienza a tambalearse ya que, si bien Hoult y Collins tejen oportunamente las dinámicas de dos jóvenes enamoradas, Karukoski invierte mucho tiempo en las inseguridades románticas del protagonista. Es posible que Tolkien no sea tan emocionante o atractivo como sus epopeyas sobre la Tierra Media, pero es una película biográfica que, esencialmente, busca rescatar el proceso creativo del escritor. Obviamente, aquí se mencionan los famosos personajes literarios y las creaciones del autor, pero en su mayor parte la película está más interesada en explorar los intereses y creencias en los que se inspiró su escritura, mostrando, por ejemplo, cómo surgieron términos como “Hobbit” y “Mordor”.
Fecha de estreno en México: 14 de junio, 2019.