Eddie Brock (Tom Hardy) es un periodista carismático y reconocido por su jefe y colegas debido a su intuición, entereza y constancia. Comprometido con la abogada Anne (Michelle Williams), Eddie se siente cómodo con la vida que lleva en San Francisco, pero está listo para una entrevista importante con Drake (Riz Ahmed), el fundador de Life Foundation, un ambicioso hombre que está dispuesto a sacrificar humanos para conocer la nueva etapa evolutiva de la especie al entrar en contacto con un misterioso simbionte alienígena recientemente descubierto. Empujando a Drake demasiado lejos y abusando de la confianza de Anne, Eddie pierde todo y es forzado a comenzar de nuevo. Sin embargo, la doctora Dora (Jenny Slate) está perturbada por las acciones de Drake y le otorga a Eddie acceso a los laboratorios Life. Ahí, el periodista se expone a un simbionte; el lodo negro comienza a cubrir su cuerpo hasta revelarse como una nueva identidad llamada Venom. El invasor alienígena disfruta de la comodidad del cuerpo de Eddie, que ofrece una cálida acogida para la misión de experimentar la vida humana, pero Eddie no está muy seguro de ello, perdiendo el control de sí mismo cuando Venom emerge desde dentro.
Hace poco más de una década, Sony intentó hacer algo con el personaje de Venom, agregando al simbionte a la narrativa de Spider-Man 3 (2007), un filme ya sobrecargado en conflictos y personajes, asignándole a Topher Grace el desafío de dar vida a un malévolo organismo alienígena. No funcionó, pero la compañía no podía olvidarse tan fácilmente del personaje. Ahora, esta nueva versión, Venom (2018), cuenta con Tom Hardy como un actor mucho más comprometido para retratar la dualidad hombre-simbionte de la criatura. El director Ruben Fleischer recupera el humor violento y absurdo de Zombieland (2009) para capturar el espíritu primordial de Venom, un ser humano que es orillado a un grado de torpeza cuando debe aprender a lidiar con la violencia y demencia que lo ha poseído. Los guionistas Jeff Pinkner, Scott Rosenberg y Kelly Marcel se esfuerzan por desarrollar la dinámica entre Eddie y Venom, pero a menudo sacrifican el desarrollo profundo y perturbador de esa dualidad a cambio de algunas bromas baratas o gags simplones. No obstante, el filme, al centrarse más en la figura de un antihéroe, no es tan aleccionador como otras adaptaciones de cómics. Fleischer se concentra en el caos, el desorden y la falta de armonía que está presente en el personaje principal y paulatinamente se expande hacia su alrededor. Es una historia de origen extensa que ofrece uno de los terceros actos más débiles de la memoria reciente en el cine de superhéroes. Sin embargo, al no tener un antagonista de las dimensiones (físicas y psicológicas) del protagonista, el relato se concentra en la guerra dentro del reportero, quien inicialmente piensa que tiene un tumor cerebral, solo para darse cuenta de que está habitado por un extraterrestre que necesita lecciones de paciencia. Varios elementos no logran conectarse por completo dentro de la narrativa de Venom. Por ejemplo, Ahmed es un villano blando, predecible y unidimensional, no es más que un arquetipo corporativo poco ético; mientras que Williams nunca encuentra el tono adecuado de Anne. Hardy es la verdadera atracción y fortaleza del filme; el actor, como habitualmente lo hace, ofrece una actuación de cuerpo completo para articular el trauma corporal y la fatiga de Eddie.
Fecha de estreno en México: 5 de octubre, 2018.