Entrevista, cámara y edición: Sofía Ochoa

Sin saber hasta dónde llegaría ni cómo se desarrollarían los hechos, la directora polaca nominada al Oscar por The Children of Leningradsky (2005), Hanna Polack, comenzó a filmar en el año 2000, en Svalka, el basurero más grande de Europa. Ahí conoció a Yula, una niña de 10 años que había llegado ahí, con su madre, cuando habían metido a su padre a la cárcel por no traer cnosigo una identificación. Eventualmente el padre murió y Yula tuvo que adaptarse a una vida de basura, alcohol y muerte. Polack la siguió durante años, 14, retratando sus sueños, sus caídas, sus aspiraciones y un vuelco inesperado en su vida.

Something Better to Come es un filme que retrata la resilencia humana, la capacidad de vencer obstáculos y de superar destinos que parecían ya estar escritos. Durante la 8ª edición de Cinema Planeta platicamos con Hanna Polack sobre las situaciones de peligro en las que filmó, pues estaba prohibido hacerlo, sobre su relación con Yula, sobre qué tanto influyó su presencia en el filme, y sobre la esencia de su personaje.

Something Better to Come se proyecta este domingo 15 de mayo en la Cineteca Nacional a las 4pm.