Entrevista: Sofía Ochoa y Alfonso Flores-Durón
Cámara y edición: Sofía Ochoa
Matías Meyer estrenó su primer largometraje, el documental Moros y cristianos (2007), hace nueve años, y hace ocho años estrenó Wadley, su primer largometraje de ficción; el primero de cuatro. La diferencia más notoria entre el primero y el más reciente, Yo, es la transición que hay entre un cine que observa, que permite que el espectador imagine buena parte de la historia, y uno que narra, que obliga al espectador a sacar conclusiones a partir de las pistas que da el director.
Yo es la adaptación cinematográfica de un cuento homónimo del autor francés, Jean-Marie Gustave Le Clézio. El personaje principal, Yo, es de mentalidad aniñada -nunca sabemos su edad con certeza- atrapado en el cuerpo de un gigante. Su padre prácticamente no existe, se esfumó en el pasado. Su madre tiene un restaurante a la orilla de una carretera. También tiene una amante. Y él, sin ningún interés, con el deber de matar pollos para el restaurante, sin amigos, sin educación, parece una especie de accidente que no encuentra cabida en ninguna parte, ni consigo mismo.
Platicamos con el director, que nos habló sobre cómo llegó al texto y consiguió los derechos. Sobre los pros y contras de trabajar con actores no profesionales. Sobre la transición hacia un cine más narrativo. Y sobre las tensiones que alimentan la historia de Yo.
Yo ganó el premio a Mejor Película en la 13ª edición del Festival Internacional de Cine de Morelia.
Yo se estrena en cartelera comercial mexicana el próximo viernes 3 de junio.
SOR (@SofOchoa)