Desde hace 15 años existe un fuerte debate entre el uso de celuloide o de tecnologías digitales para hacer cine. La revolución de las nuevas tecnologías ha cambiado para siempre los paradigmas en la industria y si bien es cierto que seguimos llamando “película”, “filme” o “cinta” a las obras que podemos ver en las pantallas de los cines, desde el ingreso de lo digital en el 2002, esta tecnología ha ganado poco a poco terreno y a partir de 2010 casi todas las grandes películas han sido grabadas en formatos que ya no requieren del proceso análogo. Además, prácticamente todos los cines alrededor del mundo ya no cuentan con la maquinaria para hacer proyecciones con cinta.
El hecho es que el uso de lo análogo está desapareciendo poco a poco, e incluso alguna vez el fotógrafo Vilmos Zsigmond dijo: “Lo digital al principio era muy malo, todo el mundo lo sabía. Ahora controla la mayor parte del mercado y es cada vez más equiparable al celuloide”.
A continuación 10 directores que siguen trabajando con película en la realización de sus obras.
Quentin Tarantino
“Espero que las próximas generaciones sean mucho más inteligentes que esta generación y se den cuenta que están perdidos”.
Probablemente uno de los directores más aguerridos en el debate “análogo vs digital”. El filma siempre con película. Para su último trabajo, The Hateful Eight, utilizó filme de 70mm y ultra panavisión 70, un método que no se utilizaba desde 1966. El resultado es una imagen muy abierta (2.76:1) y una extraordinaria calidad visual.
Para el estreno de su película eligió cines en los que se pudiera proyectar con ese material e hizo una edición especial más corta para los cines digitales porque la calidad de algunas escenas se pierde.
Ha sido explícito diciendo que lo digital es la “muerte del cine”. Porque utilizar filme es lo que hace a una película una película.
Christopher Nolan
“El filme es la mejor manera de capturar una imagen y proyectarla. Es así, ríndanse.”
En 2014 expresó su apoyo a Kodak que estaba a punto de la bancarrota como resultado de la caída de las ventas de película, mostrando que él es uno de los primeros en luchar porque ese material se mantenga vivo y en uso.
Nolan trabaja con el mismo director de fotografía, Wally Pfister, durante casi toda su carrera, y los dos se han mantenido coherentes con su decisión de seguir utilizando película para filmar, incluso en las grandes producciones.
En 2013, Nolan comenzó a filmar Interstellar, esta vez con Hoyte van Hoytema y la decisión de utilizar de nuevo filme, específicamente 35 mm y algunas secuencias en IMAX 70mm.
Nolan considera que la película análoga es más confiable y dijo: “Estoy a favor de las innovaciones tecnológicas, pero siempre tienen que sobrepasar a lo anterior”.
Steven Spielberg
“Después de todo, esta “cosa” de sueños es el medio más original de la humanidad y está datada en 1895”.
Spielberg mantiene su postura de utilizar filme como una forma de “ser leal a lo análogo hasta que el último laboratorio cierre”. Considera que hacer películas digitales es demasiado limpio, que a él le gusta la textura y el grano del método tradicional, ya que esto le proporciona un velo visual, un efecto que además va muy acorde con algunas de sus últimas películas (que son históricas): Bridge of Spies, Lincoln y War Horse. Sólo ha probado con lo digital para cuestiones animadas con The Adventure of Tintin (2011).
Paul Thomas Anderson
“Si yo no te digo qué hacer, tampoco quiero que me digas qué hacer”.
Anderson sólo tiene 7 filmes en su trayectoria pero ha sido uno de los directores más aclamados de los últimos 20 años, no sólo por el desarrollo de sus personajes o las historias, sino por las proezas técnicas.
Él al lado de su colega Quentin Tarantino, es uno de los directores que abogan constantemente por la preservación del uso del celuloide, aún si Anderson es mucho menos combativo en el debate. Una vez declaró: “Ciertamente defiendo lo que me gusta, pero tampoco trato de convencer a nadie”.
Paul Thomas Anderson, hizo la elección de utilizar película de 65mm para filmar la mayor parte de The Master, obteniendo efectos poco usuales con una imagen muy detallada y tomas abiertas impresionantes. Tuvo la misma elección para su filme Inherent Vice.
Wes Anderson
“Soy uno de los hombres menos digitales”.
Wes Anderson tiene un estilo inmediatamente reconocible gracias a una serie de elementos a los que recurre en todas sus películas, lo que lo hace fácilmente objeto de parodias. Entre estas características está el diseño de sus personajes, la composición centrada y simétrica, sus paletas de color, la música de los sesenta y un conjunto de elementos nostálgicos.
Wes Anderson tiene un gusto por el pasado reflejado en su creación de imágenes, en las que trabaja con su director de fotografía, Robert Yeoman, quien ha sido un cómplice en los proyectos del director (aún si él utiliza tecnología digital en otras películas). Han utilizado material de 35mm y de 16mm para crear los efectos justos que han estado buscando.
Richard Linklater
“Me preocupa el proceso de exhibición que está desapareciendo, de la misma manera que el celuloide”.
A lo largo de los años Richard Linklater ha mostrado su interés y compromiso con la preservación de la experiencia del cine con filme. Durante lo últimos 30 años ha dirigido orgullosamente una sociedad que se encarga de la preservación del celuloide en la ciudad de Austin, Texas.
Utilizó este material para grabar su cinta Boyhood, que grabó entre 2002 y 2014 y esta elección tenía que ver con el hecho de que sabía que las imágenes digitales iban a modificarse en su calidad año tras año, haciendo que luciera diferente lo que se filmó durante tantos años y eso no permitiría una visión coherente en la historia.
Pero el director no es un purista del celuloide, ya que sus trabajos Waking Life (2001) y Tape (2001) fueron hechos experimentando con las primeras cámaras digitales. En el 2016 también utiliza la tecnología digital para su película Everybody Wants Some!!
En recientes entrevistas ha admitido cómo lo digital mejora la imagen y el sonido, además de ser más fácil de manejar. Pero se niega a creer que es el único cambio radical en la manera de hacer cine, porque la base de todo está en la narrativa.
Andrej Petrovič Zvjagintsev
“[Filmar en celuloide es] una forma de expresión completamente distinta. Es imposible explicar esto en palabras: lo sientes a un nivel inconsciente”.
El director ruso nacido en 1964 comenzó su carrera como actor pero pronto se vio envuelto en la realización de películas. Primero se volvió internacionalmente famoso con su filme del 2003, Return, con el que debutó y además ganó el León de Oro en el Festival de cine de Venecia en su 60a. edición. Sus siguientes filmes The Banishment (2007) y Elena (2011) le proporcionaron la atención de la crítica gracias a su mirada a la condición humana y su habilidad para crear atmósferas alienantes que a la vez capturan.
Todas estas películas fueron grabadas en 35mm, como su última cinta Leviathan (2014), considerada una pieza maestram que generó controversia con el gobierno de su país por hacer un retrato de la sociedad rusa.
El director de fotografía que trabajó en esa película con el director ruso, fue Mikhail Krichman. Los dos explican el uso del celuloide diciendo que “aún se ven mejor las cosas en filme que en digital”. Una de las razones que dan es que el director no tiene que detenerse cuando se acaba el rollo de película, otro motivo es la corrección de color, que toma mucho más tiempo en lo digital que cuando se trabaja con filme y además, no es una tecnología más barata, como pudiera parecer.
Sam Mendes
“El celuloide es difícil, es impreciso, pero allí radica su gloria”.
El director británico Sam Mendes comenzó su carrera como un exitoso director de arte en teatro antes de su debut con American Beauty que lo llevó a la fama en el medio del cine. Sus películas pertenecen a diversos géneros, haciendo incluso dos de las más recientes películas de James Bond: Skyfall y Spectre.
En la primera de las dos cintas trabajó con el director de fotografía Roger Deakins, con quien tomó las decisiones del equipo que debía utilizar. Filmaron con tecnología digital porque esto les daba una mayor calidad de detalle en las tomas con poca luz.
Sin embargo, para la realización de Spectre, con el director de fotografía Hoyte Van Hoytema regresó al uso de 35mm. Y como muchos otros directores apeló a la magia de trabajar con celuloide que da un toque de romance y nostalgia, que funciona muy bien con las películas de Bond.
Darren Aronofsky
“Hay adrenalina mientras esperas la magia de los químicos que revelan la imagen”.
Él es otro de los que luchó por mantener viva a la compañía Kodak. Es persistente en la elección de celuloide en vez de tecnología digital, incluso para Noah, que necesitó muchos efectos especiales. Durante el rodaje de la película enfrentó varias dificultades, pero eso es parte de lo que él considera la magia del proceso de filmación, además de la calidad “alquímica” que el uso del celuloide tiene. Ha utilizado 16mm como Wes Anderson, lo que le dio a Black Swan una peculiar textura.
Woody Allen
“No tengo una postura radical al respecto. Soy feliz con la forma en que cada quien elige”.
Woody Allen es conocido por apegarse a sus hábitos de filmación y esa es una de las razones por las cuales sus películas son inmediatamente reconocibles. Para él siempre ha sido evidente que quiere darle una sensación de cine clásico a sus filmes por lo que normalmente elige usar celuloide en vez de tecnología digital. Sin embargo para su nueva película Café Society, que inauguró el Festival de Cannes de este año, cambió a cámaras digitales, aun cuando la película está ubicada en los años cuarenta. Y a pesar de ello es probable que vuelva al filme para su próximo proyecto.
NVL (@Natmond22)
Fuente: Taste of Cinema