En 1976, Nicolas Roeg (Walkabout¸1971) vio estrenarse su hipnótico filme, ahora de culto, The Man Who Fell to Earth, el cual está protagonizado por un flaco y pálido David Bowie (Basquiat 1996), quien hace el rol de un alienígena varado en los Estados Unidos de 1970. Utilizando el carisma de otro mundo de Thin White Duke (Bowie), la película también es una exploración enigmática, notablemente profética, de la patria adoptiva de Roeg, la cual, además, toca temas de inmigración, alcoholismo, corrupción corporativa y saturación de medios masivos.
Desde el apogeo de la ciencia ficción de los años 50 —una década que presenció tanto el amanecer de la era espacial, como la amenaza creciente de una guerra nuclear—el cine comercial ha estado obsesionado con el tema de una posible invasión alienígena, ofreciendo a los espectadores la oportunidad de reflexionar sobre las crisis reales, mientras se deleitan con un espectáculo para escapar de la realidad. Los cineastas de tendencias menos comerciales también han explotado, en repetidas ocasiones, el tema, debido a su potencial metafórico y alegórico.
En el conteo se presentan filmes de una gran variedad de géneros y aproximaciones, desde musicales hasta películas de animación. Los títulos elegidos también son una mezcla de alienígenas amigables y otros, más bien, peligrosos. Además, solamente se compiló una película por director, de manera que las omisiones de Close Encounters of the Third Kind (Dir. Steven Spielberg), Starman (1984) y They Live (1988), ambas dirigidas por John Carpenter, no son debido a razones tendenciosas.
The War of the Worlds (Dir. Byron Haskin, 1953)
La adaptación del productor George Pal y del director Byron Haskin (Robinson Crusoe on Mars, 1964) de la novela de H.G. Wells es una de las películas claves de la ciencia ficción de Hollywood.
Invasion of the Body Snatchers (Dir. Don Siegel, 1956)
Invasion of the Body Snatchers es, en gran medida, un producto de su época, infundido por la inquietud social y la paranoia progresiva de la vida estadounidense de la década de 1950.
The Thing (Dir. John Carpenter, 1982)
Desde la enigmática escena inicial, hasta su audaz y discreta conclusión, el clásico de ciencia ficción y horror de John Carpenter es el trabajo de un maestro del género en la cima de sus posibilidades.
E.T. the Extra-terrestrial (Dir. Steven Spielberg, 1982)
No es difícil ver por qué E.T. generó tanto. Esta elegante y simple historia de una amistad entre un niño y un alien que extraña su hogar, permanece como uno de los filmes más mágicos y conmovedores que hayan emergido del sistema de Hollywood.
The Brother from Another Planet (Dir. John Sayles, 1984)
John Sayles (Matewan, 1987) es reconocido como una de las figuras más ferozmente independientes y políticamente comprometidas del cine estadounidense. Pero gran parte de su trabajo como director, críticamente reverenciado, ha sido financiado por los ingresos de su carrera paralela como guionista de género a sueldo. The Brother from Another Planet es, posiblemente, el primer punto en el que se cruzan las vocaciones aparentemente dispares de Sayles.
Little Shop of Horrors (Dir. Frank Oz, 1986)
La adaptación de Frank Oz (The Blues Brothers, 1980) del musical de 1982, basado, a su vez, en una película de 1960 dirigida por Roger Corman (the Wild angels, 1966), es un deleite.
The Iron Giant (Dir. Brad Bird, 1999)
El primer largometraje como director del animador veterano, Brad Bird (The Incredibles, 2004), es una adaptación de la nouvelle de Ted Hughes, The Iron Man. La película fue un éxito de taquilla en 1999, pero el tiempo le ha dado la reputación de un clásico.
Attack the Block (Dir. Joe Cornish, 2011)
El debut fílmico del comediante británico Joe Cornish (Ant-Man, 2015) es un complejo y bello tributo a las criaturas y a los thrillers de ciencia ficción del gran John Carpenter.
Pacific Rim (Dir. Guillermo del Toro, 2013)
La exuberante historia de Guillermo del Toro (The Shape of Water, 2017) sobre monstruos marinos alienígenas luchando contra robots gigantescos es un deleite. Es tremendamente entretenida; el absurdo de las películas de serie B entregado con un presupuesto millonario.
Under the Skin (Dir. Jonathan Glazer, 2013)
Nueve años tardó Jonathan Glazer (Sexy Beast, 2000) en terminar su ambiciosa película Under the Skin. Si bien, en un inicio, toma la oscura novela satírica de ciencia ficción de Michael Faber como punto de partida, Glazer cincela la narración hasta el punto de borrar prácticamente la trama y a los personajes.
Trad. EnFilme
Fuente: BFI