Hace cinco años, Nicolas Winding Refn, un director danés relativamente desconocido dirigió una película protagonizada por la estrella de The Notebook, Ryan Gosling. Después de una recepción entusiasta en el Festival de Cannes, Drive (2011) terminó ganando seis veces su presupuesto y alcanzó rápidamente un estatus de culto entre los aficionados al cine en todo el mundo. El filme se centra en Driver (Ryan Gosling), un reservado hombre que durante el día trabaja en un taller mecánico y es conductor especialista de cine, pero, algunas noches de forma esporádica, trabaja como chofer para delincuentes. Shannon (Brian Cranston), su jefe, que conoce bien su talento al volante, le busca directores de cine y televisión o criminales que necesiten al mejor conductor para sus fugas, llevándose la correspondiente comisión. Pero el mundo de Driver cambia el día en que conoce a Irene (Carey Mulligan), una vecina que tiene un hijo pequeño y a su marido en la cárcel.
Aunque parecía como una obra sumamente original en su momento, Drive es producto de la visión cinéfila de su director, que no oculta su admiración por sus predecesores y fuentes de inspiración. Muchos de los elementos de Drive - el protagonista estoico, las brillantes luces de neón, las fuertes dosis de moral ambigua- se han visto en un sinnúmero de otras películas de todo el mundo, (aunque es pertinente señalar que algunas de ellas son posteriores al filme de Winding Refn, por lo que no pueden considerarse como influencias de Drive).
Estas son diez de las películas más memorables que, como Drive, a menudo desdibujan los límites entre el cine de autor y la película de acción estilizada. Aquí la lista elaborado por Joey Shapiro, colaborador de Taste of Cinema:
Tokyo Drifter (Seijun Suzuki, 1966)
Tetsu es un asesino a sueldo reformado que ha seguido el ejemplo establecido por su jefe, aparentemente arrepentido de su trabajo. Una vez alejado del mundo delincuente, Tetsu se encuentra vagando por las calles de Tokyo esperando una muerte segura a manos del villano Viper. Tan sólo le queda la compañía de su novia, cantante de un nightclub.
Le Samourai (Jean-Pierre Melville, 1967)
Jeff Costello es un perfeccionista que siempre planea cuidadosamente sus asesinatos y al que nunca han atrapado. Sin embargo una noche, tras liquidar al dueño de un club nocturno, queda a la vista de varios testigos. Sus esfuerzos por construir una coartada fallan y poco a poco es acorralado, tanto por la policía como los clientes que le han traicionado.
Bullitt (Peter Yates, 1968)
Frank Bullit es teniente de la policía de San Francisco. Un ambicioso político le encarga que respalde a un testigo protegido al que persigue el Sindicato del Crimen de Chicago. A pesar de que Bullit toma todas las precauciones posibles, no puede evitar que sea asesinado. A partir de ese momento, se empeñará en investigar minuciosamente el caso, que es bastante más complejo de lo que parecía a primera vista.
The Driver (Walter Hill, 1978)
Narra la arriesgada lucha de un detective que se obsesiona por cazar a su eterno y malvado enemigo, un conductor que huye de la justicia y que es muy peligroso.
The Warriors (Walter Hill, 1979)
Los ejércitos de la noche, con más de 100.000 integrantes, quintuplican los efectivos de la policía. Se enfrentan a los Warriors, una banda callejera a la que acusan injustamente del asesinato del líder de un grupo rival. Es la historia de un mundo insólito de subculturas, de guerrillas entre bandas nocturnas, desde Coney Island a Manhattan, pasando por el Bronx.
Diva (Jean-Jacques Beineix, 1980)
Un joven mensajero motociclista parisino hace una copia de contrabando ilegal de su cantante de ópera favorita en un concierto en directo. Cuando la cinta es accidentalmente sustituida por una cinta de vigilancia que incrimina a unos famosos mafiosos, dos asesinos psicópatas son enviados a la caza del mensajero.
Thief (Michael Mann, 1981)
Frank es un ladrón de joyas experto en el negocio de diamantes. Sin embargo, tras haber pasado algunos años en la cárcel, llega a la conclusión de que lo que realmente desea es abandonar su profesión y tener una agradable vida familiar. Pero antes tendrá que resolver ciertos problemas. Para acelerar el proceso interviene en un gran negocio en el que participa un poderoso y peligroso mafioso.
Ghost Dog: The Way of The Samurai (Jim Jarmusch, 1999)
Forest Whitaker interpreta a un asesino a sueldo de Nueva York, un hombre de actitud tranquila en su vida diaria que se rige bajo el código de honor de los antiguos samuráis.
The Place Beyond The Pines (Derek Cianfrance, 2012)
Luke (Ryan Gosling), un motorista que trabaja como especialista en un espectáculo viajando de una ciudad a otra, se reencuentra con una antigua y breve novia, Romina (Eva Mendes), y descubre que recientemente ella ha tenido un hijo de él, Jason. Decide entonces dejar la carretera, establecerse y trabajar de mecánico, intentar recuperar el cariño de Romina y poder cuidar de su hijo. Pero ante la falta de dinero Luke sólo ve una salida: su jefe Robin (Ben Mendelsohn) le propone robar bancos aprovechando lo hábil que es con su motocicleta.
The Guest (Adam Wingard, 2014)
Los Peterson siguen llorando el fallecimiento de su hijo Caleb en la guerra de Afganistán. En pleno duelo, David (Dan Stevens) irrumpe en el hogar familiar y conquista a cada uno de sus miembros hasta que uno de ellos comienza a intuir que David no es quien parece ser.
LFG (@luisfer_crimi)
Fuente: Taste of Cinema