Hay buenas películas y malas películas. Pero, en algún punto, una película llega a ser tan mala que ocurre algo inesperado: se alcanza tal grado que se hace divertido. Este fenómeno ocurre en un grupo de filmes que amamos, a pesar de entender que son terribles. De hecho, las amamos precisamente porque lo son.
Antes de comenzar, hay algunas reglas o guías que utilizamos para compilar la lista con las mejores peores películas:
No puede ser mala intencionalmente.
No puede haber grandes masas de gente que, sinceramente, aman la película.
Tuvo que haber sido estrenada en la pantalla grande.
No puede ser sólo aburrida o confusa o de bajo presupuesto. Buscamos películas que son, realmente, entretenidamente malas.
No pudimos agregar cada una de las películas de Steven Seagal (Nico, 1988), de modo que sólo se encuentra una en nombre de las demás.
Comenzamos:
Fear (Dir. James Foley, 1996)
The Wicker Man (Dir. Neil Labute, 2006)
Howard the Duck (Dir. Willard Huyck, 1986)
Hard to Kill (Dir. Bruce Malmuth, 1990)
Starship Troopers (Dir. Paul Verhoeven, 1997)
The Butterfly Effect (Dir. Eric Bress, J. Machye Gruber, 2004)
The Happening (Dir. M. Night Shyamalan, 2008)
Troll 2 (Dir. Claudio Fragasso, 1990)
Con Air (Dir. Simon West, 1997)
Dark Web (Dir. Bruno Vaussenat, 2016)
Cocktail (Dir. Roger Donaldson, 1988)
Road House (Dir. Rowdy Herrington, 1989)
Coyote Ugly (Dir. David McNally, 2000)
Mac and Me (Dir. Stewart Raffill, 1988)
Trad. EnFilme
Fuente: Insider