Video. Nuestra entrevista con Lila Avilés (La camarista)
Lee aquí nuestra minicrítica de La camarista
Antes de diciembre de 2019, el SARS-CoV-2, el virus que causa la enfermedad de Covid-19, era desconocido para la ciencia. "Una neumonía de causa desconocida" se informó por primera vez a la Organización Mundial de la Salud el 31 de diciembre, luego de que aparecieran varios casos en Wuhan, China. Desde entonces, el virus se ha detectado en más de un millón de personas en todo el mundo y ha matado a decenas de miles. Esta es una pandemia, una crisis global y una tragedia en una escala difícil de comprender. Hay muchas cosas nuevas por aprender: sobre el virus, el control de su propagación, el distanciamiento social, el tratamiento de los enfermos y cómo nuestros gobiernos deberían reaccionar ante esta situación caótica.
Por lo pronto, una de las pequeñas, y al mismo tiempo significativas, formas en que como sociedad podemos colaborar es quedándonos en casa. ¿Qué es una orden de quedarse en casa? Las órdenes de quedarse en casa varían de un lugar a otro, pero generalmente requieren que las personas permanezcan en sus hogares, excepto cuando se deben realizar actividades esenciales, como comprar alimentos o medicamentos, citas médicas requeridas o viajar hacia o desde trabajos esenciales. Serán varios días y semanas, seguramente meses, en los que debemos acatar responsablemente esta medida. En un intento por hacer más amable y llevadero el #QuédateEnCasa, el equipo de EnFilme se dio a la tarea de contactar -a la distancia- a distintos realizadores, solicitándoles algunas recomendaciones cinematográficas para ver desde la comodidad del hogar. Todos los días iremos publicando una nota de este tipo. Agradecemos mucho a los directores que generosamente aceptaron contribuir para hacernos, a todos, más llevadero el encierro. Todos lo estamos viviendo de forma similar, simultáneamente. Pensamos en especial en quienes la están pasando peor: quienes han sido contagiados, sus familiares y, significativamente, los hombres y mujeres que los están atendiendo pese a poner en riesgo su propia salud y, sí, también su vida. Pensemos en ellos en este tipo. Ya estamos en deuda con ellos.
Aquí puedes dar seguimiento a más recomendaciones de cineastas #QuédateEnCasa
Continuamos esta serie con Lila Avilés, actriz, directora de teatro y especialista en artes escénicas que debutó en la realización cinematográfica con el cortometraje Dèjá Vu (2016). Su primer largometraje de ficción, La camarista (2018) –premiado en el Festival de Cine de Morelia como mejor película, y galardonado como la mejor ópera prima en los Ariel 2019-, es un íntimo, minucioso y conmovedor relato sobre las vicisitudes, decepciones, alegrías e ilusiones que vive una mujer en su rutina laboral al interior de un hotel de lujo.
“5 películas que ver en estos días de Quédate en casa que les recomiendo”, nos dice Lila…
Mystery Train
Dir. Jim Jarmusch (Estados Unidos/Japón, 1989)
Es una película con tres historias entrelazadas a partir del “El Rey” de Memphis, Elvis Presley y la canción Blue Moon. Las tres historias parten de personajes extranjeros con cualidades particulares, donde no se necesita gran infraestructura para contar algo entrañable, a partir de la premisa de un ícono que dejo el legado “The City Of Dreams” sobre una ciudad fantasma. El cine de Jarmusch tiene esa cualidad: un cine intimista sin dejar de ser gracioso y ágil, demostrándonos otra cara siempre de lo que significa ser americano, con un gusto musical exquisito, personajes atípicos y diversos, más una forma de filmar inconfundible y deliciosa.
Sátántangó (Dir. Béla Tarr, Hungría/Alemania, 1994)
La flor (Dir. Mariano Llinás, Argentina, 2018)
En una época donde ya se están haciendo series de diez minutos, estas dos películas son una oportunidad para navegar siete y trece horas viendo cine. Pocas veces nos damos la oportunidad de tener tiempo, así que no hay como decir que “no”…
Sátántangó dura siete horas, a partir de la novela del húngaro Làszló Krasnahorkai. La historia se centra en el abandono de una granja colectiva en Hungría a finales del régimen comunista. Filmada en blanco y negro y con una belleza profunda, Béla Tarr logra mandarnos a los abisales de la narración casi como un Hamlet húngaro, siempre con el viento y la filosofía como cráneo humano usado como cámara.
[Video. Nuestra entrevista con Béla Tarr]
Por otra parte, La Flor es una película argentina dividida en tres partes con duración de trece horas, con un prólogo donde el director explica la película, para luego adentrarnos en las historias interpretadas por el grupo teatral Piel de Lava, cuyas integrantes interpretan diversos personajes en varias lenguas, diversificando los estilos y rompiendo los juegos fílmicos. Desde una historia de detectives, una momia, hasta la plenitud de la naturaleza, la película viaja de un lado al otro abriendo los artificios y dejando que la convención escénica y fílmica cruda se trasmute en realidad.
Poetry
Dir. Lee Chang-dong (Corea del Sur, 2010)
Poetry es una película coreana del mismo director de Burning [lee aquí nuestra minicrítica]. Es el sutil retrato de una señora de sesenta años, su interés por la poesía y buscar en el mundo belleza mientras comienza con síntomas de Alzheimer y la lucha por subsistir. La película es de una fineza y una elegancia poderosísima dirigida con la sensibilidad femenina de un hombre brutal. Es un ejemplo de lo que Desmond Morris en su libro Masculino y Femenino nos ayuda a entender con las divisiones de género en busca del sagrado equilibrio; todos contamos con nuestra feminidad feroz y nuestra tierna masculinidad o nuestra masculinidad salvaje con sagaz femineidad.
Guerra fría
Dir. Pawel Pawlikowski (Polonia/Reino Unido, 2018)
[Video. Nuestra entrevista con Pawel Pawlikowski]
[Nuestra minicrítica de Guerra fría]
Cold War es una película polaca en blanco y negro, que retrata el periodo de la Guerra Fría con una historia de amor. Es una oda que el director hizo a la historia conflictiva de sus padres, sin ser una historia propiamente autobiográfica, con un híbrido contemporáneo de Romeo y Julieta. Cold War fue la siguiente película después de “Ida” 2013, la cuál le valió a Pawilowski gran reconocimiento internacional y distinción con la fotografía como bandera.
Una vez más, con una cinematografía bellísima, la película te sumerge en el universo de dos personajes encantadores con sus virtudes y decadencias humanas, en una época rota. Una época con fronteras y con limites en la libertad de expresión y relaciones humanas, para atesorar el arte y el mundo interior que tenemos adentro, que es indudablemente nuestro mejor aliado siempre. Sin duda una buena recomendación para estas épocas virtuales y fronterizas.
Y de pilón El ángel exterminador
Dir. Luis Buñuel (México, 1962)
[Video. Silvia Pinal habla sobre El ángel exterminador]
Con estas épocas... el chiste se cuenta solo. Hagan ustedes mismos su crítica.
Ah, y otro pilón: La doble vida de Veronica
Dir. Krzysztof Kieslowski (Francia/Polonia, 1991)
[Video. ‘I'm So-So...’, un documental sobre Krzysztof Kieslowski]
Desde El Decálogo, su Trilogía o La Doble Vida de Veronica, Kiéslowski junto con su guionista ha demostrado la importancia una y otra vez la razón del (¿por qué?) hacer cine. La Doble Vida de Veronica es una hermosa película fotografiada entre verdes y ocres protagonizada por la actriz francesa Iréne Jacob. La historia es sobre dopellgangers, o tus otros yo. La película te hace cuestionar si esto seria una virtud o no, regresarnos al terreno sensible de lo humano.