Inauguración · Día 2 · Día 3-Día 4-Día 5

Cuarto día de la competición de la Berlinale. Con muchas expectativas por la presentación de Knight Of Cups de Terrence Malick. Las primeras críticas no han sido favorables para la séptima película del realizador estadounidense detrás de The Tree Of Life (2010). El recibimiento fue más amable para Mr. Holmes de Bill Condon, que se lleva como protagonista a Sir Ian McKellen. El director chileno Patricio Guzmán generó sorpresa en la Berlinale con su nuevo trabajo documental, El botón de nácar, una película sobre el genocidio colonial al pinochetista.

Knight of Cups

Dir. Terrence Malick, Estados Unidos

(Competencia Oficial)

En Knight of Cups, Malick se centra en la historia de un guionista de Hollywood rodeado de excesos y que decide encontrar el amor verdadero. El protagonista es Christian Bale y en su búsqueda termina involucrando a tres mujeres personificadas por Natalie Portman, Cate Blanchet e Imogen Poots. 

Les dejamos las primeras críticas del filme:

Con su nueva película francamente, Malick ha decaído. [Knight of Cups] tiene momentos de brillantez visual, momentos de reverencia e incluso grandeza. Pero su estilo se está estancando en el manierismo, en el tópico y en la auto-parodia. El estudio de Terrence Malick sobre el tormento de Christian Bale son devaneos humeantes, paisajes-ruina-porno, y una autocompasión tan superficial. Lo que queda claro de Knight of Cups (el título está tomado de una carta del Tarot –cuando Rick (Bale) va a una lectura de Tarot como parte de su viaje interior) es que el héroe es, fantásticamente autocompasivo y engreído a la vez. Y sin embargo, nunca se nos invita a verlo como algo más que una figura convincente, que interceda o justifique las maravillosas o escalofriantes cosas que la cámara Emmanuel Lubezki ve.

-Peter Bradshaw, The Guardian le da 2 estrellas de 5

Christian Bale, Cate Blanchett y Natalie Portman protagonizan la historia de un guionista que trata de dar sentido a su vida. Después de haber estado oscilando fuera de la órbita con To The Wonder, pareciera que Malick fue absorbido por un agujero negro, pero con Knight Of Cups en regreso a Tierra Firme sea a tientas. Una película decididamente poética e impresionista sobre la parálisis creativa, la indecisión, padre e hijos, musas femeninas y la vida escapando a toda velocidad como el agua de un río. El resultado es un cierto tedio a causa de la repetición unida a las sutilezas rítmicas e imaginativas. Mientras que su última obra de verdadero peso, The Tree of Life, logra momentos extraños de expresividad emocional y lírica, éste filme opera principalmente en un nivel más mundano e incluso narcisista. No construye o logra aquello para lo que parece estar diseñada, que sería proveer una apoteosis dramática o filosófica.

-Todd McCarthy, The Hollywood Reporter

Christian Bale interpreta a un alma perdida, a la deriva en Hollywood en el último drama impresionista de Terrence Malick. Entras en una película de Terrence Malick y esperas un magnífico collage de sonido e imagen, pero no necesariamente la de un club con luces de neón, una fiesta en la piscina del Caesars Palace, o una sesión fotográfica en la que se le dice a una modelo que pose como "una sucia ama de casa”. "En otras palabras, hay algo a la vez vívidamente familiar y sorprendentemente diferente en Knight Of Cups, una zambullida febril en la nube tóxica de la decadencia que gira alrededor de un guionista de Los Ángeles. Después de haber hecho un retrato de la vida estadounidense contemporánea tan reconocible y ajena en To The Wonder, Malick extiende ahora esa película en una crítica corrosiva de hedonismo de Hollywood. Los que han tenido su ración de reflexiones impresionistas del director encontrarán en su séptima película un argumento y atmósfera tan vacía como el estilo de vida que propone en la pantalla.

-Justin Chang, Variety

Para los que esperábamos que Knight of Cups fuera un desvío de Malick hacia el progresivo paso de un horizonte más lejano, como fue The Tree Of Life, es una decepción, ya en que su nueva película resulta más ininteligible que nunca.

-Eric Kohn, Indiewire

Christian Bale y Natalie Portman, protagonista de Knight Of Cups

Mr. Holmes

Dir. Bill Condon, Reino Unido, Estados Unidos

(Fuera de Competencia)

Ian McKellen interpreta a Sherlock Holmes de 93 años y ya retirado, vive en una lejana granja en Sussex, donde sus recuerdos e intelecto comienzan a ir a la deriva. Vive con un ama de llaves y su joven hijo, Roger, cuyo comportamiento paciente y respetuoso despierta el afecto paternal de Holmes. La rutinaria vida de Holmes se limita al cuidado de su colmena, a la escritura de su diario y a la lidia con la disminución de la capacidad de su afilada mente, hasta que Roger se tropieza con un caso desconocido hasta ese momento.

Primeras impresiones de la película:

Sir Ian McKellen ejecuta elegantemente el papel de Sherlock en una película estilizada, emotiva e intrigante por momentos, pero que se ve obstaculizada estructuralmente por depender en dos secciones de flashback separadas. El primero tiene que ver con el reciente viaje de Holmes a Japón, y el otro correspondiente a tres décadas atrás, relacionado a su último caso, que todavía lo persigue, y que involucra a una mujer desaparecida de manera misteriosa, Ann Kelmot, interpretado por Hattie Morahan. La narración indirecta es interesante y McKellen es creíble en la versión madura de Holmes, elegante y profesional.

-Peter Bradshaw, The Guardian le da 3 estrellas de 5

El director Bill Condon vuelve a formar equipo con Ian McKellen interpretando a un anciano Sherlock Holmes, quien reflexiona sobre los fragmentos no resueltos de su último caso y cómo ese asunto lo dejó marcado de por vida. 17 años después de Gods and Monsters, la película que lo puso en el mapa como director y que le hizo ganar un Oscar como Mejor Guión, Condon se reencuentra con la estrella temible de esa película, Ian McKellen, en una variación agradable en temas comunes como el envejecimiento y la mortalidad. Condon aborda las sombras del deseo y la creatividad cerca del final de una vida. Mr. Holmes se centra también en otro monstruo sagrado, el detective imagianrio de Baker Street, mientras Holmes lucha con la perdida de su don más preciado: sus facultades mentales. Es una película reflexiva, impulsada por el desempeño impecable de McKellen como un hombre de 93 años solitario y debilitado por la edad, y aún así astuto e incluso compasivo de maneras que sorprenden. Su oleaje emocional conmueve por su sutileza y gracia.

-David Rooney, The Hollywood Reporter

Elenco de Mr. Holmes: Sir Ian McKellen, Milo Parker and Laura Linney

El botón de nácar

Dir. Patricio Guzmán, Chile, Francia y España

(Competencia Oficial)

La voz del cineasta es el hilo conductor de un relato que reflexiona sobre el agua y el cosmos, con imágenes que parten desde el desierto de Atacama, en el norte del país, para llevar al espectador a la Patagonia Occidental, en donde se hunde la cordillera de los Andes, en el sur, en el agua y el hielo. Guzmán habla de un país que tiene la costa más larga al Pacífico -de más de 4.000 kilómetros de largo-, que en los libros escolares aparece dividido en tres: norte, centro y sur.

Primeras críticas:

El maestro documentalista Patricio Guzmán, estudia la terrible historia de genocidio de Chile, y la represión política historia terrible de Chile de genocidio y la represión política a través de sus océanos y la voz del agua. Es difícil hacer un seguimiento de una película tan singularmente resonante como Nostalgia for the Light, que cautivó al público con su yuxtaposición emocionante de la grandeza del cosmos y de la pequeñez y la crueldad de los seres humanos hacia su propia especie. Para muchos de sus admiradores, El botón de nácar, tendrá semejanza con aquella cinta, una cuya visión deslumbrante ya se había hecho. En lugar de la arqueología del desierto chileno, Guzmán toma el agua como su motivo, abriendo la posibilidad de otros elementos por venir. Sería muy congruente con en el espíritu de un director cuya reputación descansa sobre una trilogía documental monumental de los años setenta, La batalla de Chile.

—Deborah Young, The Hollywood Reporter

Lo qué Nostalgia For The Light hizo por el desierto, El botón de nácar hace por el agua, pero la fusión hábil del pasado y el presente que caracterizaba a la anterior película de Patricio Guzmán se vuelve farragosa aquí a causa de la voz en off con tono de clase de Ciencias Naturales y un poco satisfactorio puente entre dos temas más bien dispares. Por un lado, hay una discusión fascinante de los pueblos indígenas que vivían en los canales de la Patagonia occidental; por el otro, la práctica escalofriante de la dictadura de Pinochet sobre los presos políticos en el mar. Imágenes atractivas y temas envolventes que pronostican para Botón un poco probable éxito que iguale a Luz.

-Jay Weissberg, Variety

Patricio Guzmám, director de El botón de nácar