Tras filmar varias películas en el viejo continente, fue fácil para Woody Allen encontrar la inspiración para su más reciente cinta, Blue Jasmine (2013), que se estrenó el viernes en los Estados Unidos. Esta cinta supone  una inflexión dentro de la serie de declaraciones de amor a ciudades europeas -Midnight in Paris (2011), To Rome with Love (2012)- que Allen ha realizado en los últimos años.

Después de la crisis financiera y una serie de casos de fraude como el de Bernie Madoff, existen muchas mujeres en Manhattan que, al igual que la protagonista de la cinta, Jasmine, interpretada por Cate Blanchett, perdieron su fortuna hasta reducir sus pertenencias a una chaqueta Chanel, maletas de diseñador y un puñado de antidepresivos. La actriz australiana ha recibido alabanzas por su papel en Blue Jasmine, primera película que realiza con el director neyorquino.

El filme en el que también actúan Alec Baldwin, Sally Hawkins y Peter Sarsgaard recaudó $175,991 dólares en la noche de su estreno en tan solo 6 salas de cine. Su distribuidora, Sony Pictures, reportó que Blue Jasmine está cerca de la película de Allen con mayor recaudación de la historia, Midnight in Paris, que logró $99,834 por pantalla en su primer fin de semana.

La cinta con tintes de tragedia griega fue descrita por The New York Tines como el trabajo “más satisfactorio” desde Match Point (2005) y se espera supere en taquilla el promedio de cintas como Spring Breakers (2013), para convertirse el mejor debut en salas en lo que va del 2013.  Blue Jasmine todavía no tiene fecha de estreno en México. 

JAR (@franzkie_)

Fuente: Indiewire , El Mundo