Títulos que integran la Selección Oficial de Cannes 2018

Día 1 · Día 2 · Día 3 · Días 4 y 5

Durante los días 4 y 5 de la 71ª edición del Festival de Cine de Cannes se presentaron en competencia oficial: Le livre d’image, dirigido por el icono de la ‘nueva ola francesa’, Jean-Luc Godard; Ash Is Purest White del realizador chino, Jia Zhangke; y Girls of the Sun de Eva Husson.

Image Book (Le livre d’image)

Dir. Jean-Luc Godard, Suiza

[Selección oficial en competencia]

¿Aún recuerdas cómo solíamos entrenar nuestro pensamiento? Casi siempre comenzábamos a partir de un sueño... Nos preguntábamos cómo pueden surgir en nosotros colores tan intensos en la oscuridad Con una voz tan suave y débil, diciendo cosas importantes, asombrosas, profundas, justas…Imagen y discurso…Parece un mal sueño escrito en una noche tormentosa Bajo los ojos de Occidente Paraísos perdidos Ha llegado la guerra...

Image Book es una obra que retoma muchas de las ideas familiares de Jean-Luc Godard, pero con una urgencia inesperada y una extravagancia visceral. Es una película de ensayo con el lenguaje corporal de una película de terror, aceptando abiertamente las preocupaciones tradicionales de Godard con el estado ético del cine y la historia, y mirando al mundo árabe e indirectamente examinando nuestro orientalismo.

“Godard” es un lenguaje cinemático que posiblemente haya sido ampliamente adoptado por el teórico cultural o el artista conceptual. Pero Godard siempre insiste en la prerrogativa más amplia y tradicional del cine y la grandeza que solo el cine, solo el fenómeno de las personas reunidas en la oscuridad antes de la gran pantalla, puede transmitir. En Image Book, parece hacer un gesto, una vez más, sobre el tema del fracaso culpable del cine de presenciar los horrores del mundo moderno, la falta de explicación de Auschwitz e Hiroshima. El cine, esa industria de imágenes masivas emocionantemente seductora y diversionista del siglo XX, evolucionó en conjunto con las tecnologías que nos dieron la matanza, el genocidio y la tiranía: los ultrajes que ocurrían detrás del cine.

-Peter Bradshaw, The Guardian ★★★★

En los últimos segundos de The Image Book, el rápido montaje de películas y medios de comunicación de Jean-Luc Godard realizado en sus declaraciones fragmentadas, una bailarina gira y cae al suelo. A pesar de la asamblea densa y turbia que conduce a este clímax, es uno de los finales más auténticos en la carrera de casi 60 años del cineasta. Habla de las intenciones de un cineasta que sobresale en una polémica desordenada y singular: ten toda la diversión que quieras, porque todos están condenados de todos modos.

Godard tiene mucho que decir en The Image Book, con arrebatos de poesía inspirada y asedios airados, en sintonía con las dimensiones apocalípticas que caracterizan gran parte de su obra de último momento. Su voz ronca y áspera emanó de diferentes canales en todo el teatro en el estreno de Cannes, sus pronunciamientos líricos enraizaron audiencias en los confines de su inquieta mente. Eliges participar, o rechazar todo el esfuerzo por completo. Cualquiera que esté preparado para hacer esto último cae en la trampa del cineasta: más instalación de medios que película, The Image Book lamenta un mundo vano en el proceso de desintegración, y su película está diseñada para simular ese proceso en términos viscerales.

-Eric Kohn, IndieWire

Hace cincuenta años, Jean-Luc Godard era un revolucionario cinematográfico. Ahora, la reclusiva leyenda de 87 años está en otro plano completamente, con sus películas magistralmente opacas y enloquecedoramente esquivas, tantas críticas y desmantelamientos del cine como ejemplos de ello. Por otra parte, las palabras como opacas y esquivas venden a Godard corto, porque implican que le interesan cosas como la trama y el personaje. No lo es, excepto en el sentido más vago y más poético. The Image Book, que se estrenó en competición en Cannes el viernes, es un ensayo de sonido e imagen, un poema que utiliza algunas de las herramientas del cine, tal vez incluso un ataque contra la idea de una película. Es un viaje al planeta Godard, que en este momento es un planeta capaz de sustentar e incluso inspirar la vida humana, pero solo si son el tipo correcto de humanos.

-Steve Pond, The Wrap

Ash Is Purest White (Jiang hu er nv)

Dir. Jia Zhangke, China/Francia

[Selección oficial en competencia]

En 2001, la joven Qiao está enamorada de Bin, cabecilla de la mafia local de Datong. Cuando Bin es atacado por una pandilla rival, Qiao se defiende y dispara varias veces. Es condenada a cinco años de cárcel. Tras cumplir su pena, Qiao busca a Bin e intenta volver con él. Pero él no quiere seguirla. Diez años más tarde, en Datong, Qiao sigue soltera y ha salido adelante manteniéndose fiel a los valores de la mafia. Pero Bin, cansado de la vida, regresa buscándola, a la única persona a la que ha amado...

Con Ash is Purest White, el siempre sorprendente y habitual director de cine Jia Zhang-ke nos ofrece una compleja tragedia romántica de las aspirantes a clases de gánsteres de China. Y hay un espeluznante brillo futurista: un miasma de extrañeza visionaria que le da un brillo distintivo a la arena social-realista. Como suele ocurrir con este director, el cambio de siglo es el momento clave: cuando China comenzó a abrazar el capitalismo, la competencia, la expansión rápida y los símbolos de estatus occidentalizado como los teléfonos inteligentes. En el año 2001, vemos gente bailando YMCA de Village People en una fiesta. Al igual que con la entusiasta versión del Go West de Pet Shop Boys en su película anterior, Mountains May Depart, es un presentimiento de ese nuevo y valiente mundo por venir.

-Peter Bradshaw, The Guardian ★★★★

Jia Zhang-ke nunca iba a hacer una película convencional del inframundo jianghu, e incluso si los elementos de género y los detalles de los personajes arduos están entretejidos en Ash Is Purest White, este drama típicamente sin prisa y de larga duración es una pieza muy importante dentro del cuerpo de trabajo contemplativo de autor chino. Comenzando en 2001 y terminando en una melancólica víspera de Año Nuevo que inaugura el año 2018, la película ofrece un papel principal trascendental para la esposa de Jia y la musa indispensable Zhao Tao. Ella interpreta a una mujer de un pueblo de minas de carbón moribundo enamorada de un mafioso local, su complicada relación se desarrolla en el contexto de un país que cambia a un ritmo vertiginoso.

-David Rooney, The Hollywood Reporter

Ash Is Purest White encuentra al cineasta más prominente de China repitiendo melancólicamente los éxitos con el fin de romantizar aún más algunas de las fijaciones que siempre han dominado su trabajo. El paso del tiempo, la barrida de la modernidad y la violencia del forajido que se remonta a la Revolución Cultural, como era de esperar, vienen a definir esta saga fracturada de un gánster de poca monta y la chica que estuvo siempre a su lado. Jia Zhang-ke hace un cuento épico que nunca captura la poesía de su título en inglés. Es una historia de amor sin amor, contada en tres partes, cinco tipos de cámara diferentes y 17 años de cambio: es una película que a menudo se siente como una megamezcla de los grandes éxitos de Jia, pero que los reafirma con poco de la gracia inefable que hacen que cada uno de ellos sea tan valioso por sí mismos.

-David Ehrlich, IndieWire

Girls of the Sun (Les filles du soleil)

Dir. Eva Husson, Francia

[Selección oficial en competencia]

En Kurdistán, Bahar, comandante del batallón de "Las hijas del sol", se prepara para liberar su ciudad de manos de los hombres de negro, con la esperanza de encontrar a su hijo. Mathilde, una periodista francesa, está encargada de cubrir la ofensiva y de dar a conocer la historia de esas guerreras excepcionales. A partir de ese momento, sus vidas dan un giro y deben luchar por la misma causa: la mujer, la vida, la libertad.

Girls of the Sun de Eva Husson es una película de guerra feminista: apasionada, llena de suspenso, enojada. Para algunos, su sólida retórica de la película de acción se sentirá mal con los problemas y acontecimientos contemporáneos, una retórica que de otro modo podría pasar desapercibida en una película convencionalmente poblada sobre, digamos, la lucha por los aliados en la segunda guerra mundial. Al igual que ese tipo de película, Girls of the Sun es lo suficientemente sofisticada como para estar seguros de dónde se ubican lo correcto y lo incorrecto, y de paso tener fe en la eficacia del periodismo en zonas de guerra.

-Peter Bradshaw, The Guardian ★★★★