Tomemos un momento para descender a las nuevas profundidades de la mezquindad de Donald Trump.
En enero de 2015, se le pidió a Trump que interpretara al presidente en Sharknado 3: Oh Hell No! Él no era la primera opción, ese honor cayó en Sarah Palin, pero las negociaciones no tuvieron éxito y los productores buscaron otra celebridad ridícula para interpretar al jefe de estado y compartir cómodamente escenas con Tara Reid.
Casi inmediatamente, Trump dijo que sí al papel. “Estaba encantado de que se lo preguntaran”, comentó David Latt, director del estudio.
Las conversaciones avanzaron en la elaboración de un contrato, enviado al abogado Michael D. Cohen (ahora bajo investigación del FBI en relación con la investigación de Rusia), antes de que el equipo de Sharknado se enfrentara a un súbito silencio.
¿La razón? “Donald está pensando en hacer una carrera legítima para la presidencia, así que nos pondremos en contacto contigo”, recordó Latt. “Este podría no ser el mejor momento”.
Con el tiempo agotándose para el equipo de producción, a Mark Cuban (empresario estadounidense, inversionista, y dueño de los Mavericks de Dallas de la NBA) se le ofreció el papel, lo que provocó una respuesta bastante furiosa. “Entonces nos enteramos inmediatamente del abogado de Trump”, señaló Latt, “básicamente dijo: ‘¿Cómo te atreves? Donald quería hacer esto, te vamos a demandar, vamos a cerrar todo el show’.”
“Lo tomé personalmente, pero lo entiendo ahora”, agregó. “Esa fue mi aventura cuando intenté hacer negocios con Donald Trump, y eso es Sharknado”.
Sharknado 5: Global Swarming se transmitirá en Syfy el 6 de agosto.
Trad. EnFilme
Fuentes: The Independent, The Hollywood Reporter