Por Verónica Sánchez (@SofiaSanmarin)
Anton Corbjin (Control, 2007), el fotógrafo y cineasta holandés, fue el artista homenajeado del Festival de Cine de Guanajuato (GIFF) en su edición 17. La gala inaugural tuvo lugar la noche de ayer en el Teatro Juárez en Guanajuato capital, donde Corbjin recibió la Cruz de Plata de manos de la directora del festival, Sarah Hoch, como reconocimiento a su trayectoria; una que incluye un amplia videografía -80 videos- para grupos como Depeche Mode, Nirvana o Arcade Fire. En 2007, el holandés debutó con la deslumbrante y dolorosa Control, sobre la vida y la muerte de Ian Curtis, el cantante de Joy Division, un músico cercano emocionalmente al fotógrafo: incluso llegó a retratar a la banda antes del suicidio de Curtis en 1980. Una cinta a la que siguió El americano (2010), protagonizada por George Clooney. En la breve ceremonia, se pudo ver un video con una semblanza y un repaso a su carrera, el cineasta se mostró agradecido por el entusiasta recibimiento del público:
No me lo esperaba. Ver resumidos 40 años de mi vida pasar ante mis ojos en unos cuantos minutos es algo sorprendente.
Tras la ceremonia, y como parte de homenaje se proyectó The Most Wanted Man (2013), la nueva cinta del cineasta holandés, y literal, la última película protagonizada por el extinto Philip Seymour Hoffman (1967-2014), una historia basada en la novela homónima de John le Carré, un thriller que tiene como trasfondo los atentados del 11 de septiembre en Estados Unidos.
Al medio día se llevó a cabo la ceremonia de inauguración con la premiación del concurso documental Identidad y pertenencia. En el intermedio, el realizador danés, Lars von Trier, apareció por segundos, de manera virtual, hondeando la bandera de México y utilizando una playera negra con el logo del festival “Más cine por favor”.
Proyecciones:
The Most Wanted Man (Película de apertura)
(Dir. Anton Corbjin, Reino Unido, Estados Unidos, Alemania, 2014, 122’)
El último Philip Seymour Hoffman, tiene una interpretación soberbia como el viejo espía alemán inteligente y vil de A Mos Wanted Man, una tenue y atmosférica adaptación que Anton Corbjinhace de la novela homónima de John Le Carré. Un drama cuyo entramado tiene como trasfondo los atentados del 11 de septiembre en Estados Unidos. Una mirada cínica a las complejidades del trabajo contraterrorista después del 11-S.
Ambientada en los suburbios de Alemania la cinta se centra en la llegada de un desaliñado hombre, mitad checheno, mitad ruso, Issa Karpov (Grigoriy Dobrygin), que llega a Hamburgo para reclamar la herencia de su padre, un exmilitar ruso. Los lazos que entreteje con la abogada Annabel Richter (Rachel McAdams), una alemana idealista y ferviente defensora de los derechos civiles, lo llevarán a relacionarse con Thomas Brue (Willem Dafoe) el dueño de un banco privado alemán. Los espías de tres naciones dedicados a la lucha antiterrorista —liderados por el sórdido Gunther Bachmann (Seymour Hoffman), un espía al estilo de la vieja escuela—, están convencidos que han localizado a un importante terrorista islámico. Pero Issa aparentemente es un musulmán devoto, que a lo largo de la historia y bajo la influencia de Bachmann, servirá de señuelo para implicar a Adullah, un líder de la comunidad musulmana local. El desafío de Bachmann es conseguir información a través de Abdullah y con ello exponer a toda una red de financiación ilícita terrorista que opera en Hamburgo. Pero para esto necesita tiempo, y la amenaza constante de que sus rivales de otras agencias, además de sus camaradas estadounidenses —los cuerpos de seguridad de Estados Unidos— podrían moverse más rápido y arrebatarle a Abddullah y posiblemente al inocente Issa, de quien solo se sabe que no tiene papeles y que necesita llegar a un lugar seguro.
Our Vinyl Weighs a Ton: This Is Stones Throw Records (Selección Oficial Documental)
(Dir. Jeff Broadway, Estados Unidos, Reino Unidos, 2013, 94’)
Los orígenes del legendario sello discográfico estadounidense L. A. Stones Throw Records, las relaciones que se forjaron entre sus artistas, conformado por bandas neo-folk/jazz como The Stepkids, o estrellas underground del hip-hop como Madlib o Charizma —asesinado en 1993—, se exploran en el documental Vinyl Weighs a Ton: This Is Stones Throw Records a través de la figura de su fundador, el DJ Peanut Butter Wolf (Chris Manak). En 90 minutos se hace una radiografía pormenorizada de Peanut y la constelación ecléctica de estrellas que él eligió para conformar su casa discográfica.
La cinta se divide en siete capítulos en los que se despliegan entrevistas con cantantes tan dispares como Talib Kweli o Kanye West —quienes declaran la importancia que Stones tuvo para ellos—, imágenes de archivo de conciertos y grabaciones caseras. Aunque es un filme dirigido a los seguidores del hip-hop —puede que no despierte pasiones en un amplio espectro de público— es un documental que sabe ganarse la complicidad del público gracias a la agilidad de su edición, a la atmósfera intimista y el humor con el que salpica muchas de las interacciones de ese núcleo artístico. En esta película la música es crucial, pero no ensombrece el enfoque de la película: las personas que animaron y construyeron la legendaria Stones Throw a través de los años, la tragedia que empujó a Manak a crear su propio ‘Motown para inadaptados’, grabando a músicos tan experimentales como inclasificables Mayer Hawthorne o James Pants. Our Vinyl Weighs a Ton: This Is Stones Throw Records es un documental musical agradable y un canto a la escena musical independiente.
The Chaperone (Selección oficial cortometraje documental)
(Dir. Fraser Munden, Neil Rathbone, Canada, 2013, 13’)
The Chaperone es un cortometraje documental animado, que combina imágenes en stop-motion, títeres y acción real, para narrarla verdadera historia de Chaperone Ralph, un maestro de Montreal que debe defender a sus estudiantes del constante bullying de una pandilla de motociclistas que además, buscan estropear el baile anual de la escuela. El relato es narrado por una voz en off, la del propio Ralph, que no son más que extractos tomados de una entrevista hecha al profesor canadiense y que tiempo después fueron insertados a lo largo del cortometraje. A pesar de que su estilo parezca animación tradicional en 3D, lo cierto es que tiene un estilo totalmente propio y bastante poco ortodoxo. La obra de Munden y Rathbone, te hipnotiza por las imágenes y por la cadencia de las frases de una historia sencilla y emotiva. Un corto placer animado.
The Chaperone 3D Trailer from Thoroughbread Pictures on Vimeo.