Crónica diaria del IFFPanamá: Día 1 · Día 2 · Días 3 y 4 · Premios Platino · Entrevista con Pituka Ortega· Ganadores
El último día del festival estuvo dominado por la química entre los actores Ricardo Darín (argentino) y Luis Tosar (español). Darín es uno de los mejores actores del mundo, de los pocos capaces de reinventarse en cada papel, lo que ha hecho que se le reconozca como una figura latinoamericana sin haber formado parte del poderoso starsystem de Hollywood, y el más joven Tosar es uno de los mejores y más importantes actores de España. La razón para juntarlos fue su participación en la película que cerró el festival: Una pistola en cada mano (2012), que gracias al festival estrenará en mayo en cartelera comercial panameña.
En conferencia de prensa, llevada en un tono relajado, impregnado del buen humor de ambos, y en la que, además de los dos actores, estuvieron presentes Pituka Ortega, directora del festival, y Diana Sánchez, directora creativa, se tocaron puntos interesantes sobre la cinematografía iberoamericana. Por ejemplo, sobre el desarrollo del cine latinoamericano, Darín dijo que, a su parecer, anteriormente se hacían películas que requerían fijar su mirada hacia el pasado y que las nuevas generaciones de cineastas están mirando hacia el futuro, están teniendo la oportunidad de crear imágenes sobre lo que vendrá. Añadió también un emotivo y cierto reconocimiento al festival, que más adelante, en la noche, durante la ceremonia de clausura en el Teatro Nacional, Tosar retomaría con efusión: el IFF Panamá es un festival extraordinario, que esta creciendo con fuerza, que está uniendo a los hablantes del español y del cine y que está dándole más importancia a la parte humana, incluso por encima del cine mismo, porque, a fin de cuentas, de lo que habla el cine es, precisamente, de las personas.
Antes de que diera inicio la proyección de la película de cierre, se entregaron los tres premios del público que otorga el festival. Dos de ellos se los llevó el documental Invasión, del panameño Abner Benaim. No es de extrañar que este documental que recupera a través de testimonios el episodio de la invasión de Estados Unidos a Panamá para sacar al dictador Noriega del poder, haya sido el gran ganador de la noche. La gente panameña lo recibió con gran apertura desde su estreno y rápidamente se corrió la voz. El ganador del premio del público a Mejor Largometraje de Ficción fue 3 Bodas de Más de Javier Ruiz Caldera, que había ganado el mismo premio, con el filme Promoción fantasma, el año pasado.
Una pistola en cada mano (Cesc Gay) es una comedia no romántica, enfocada en hombres, sobre la infidelidad, narrada en viñetas que tienen su reunión hacia el final. Como suele suceder con este tipo de películas, el tema no es desarrollado con profundidad, solo esbozado.
SOR (@SofOchoa)