El día de hoy falleció a los 83 años de edad el cineasta Rafael Corkidi distinguido con el Ariel de Oro este año y ganador del Ariel a Mejor Fotografía en 1972 por su trabajo en El Topo (Alejandro Jodorowsky, 1970). En la década de los sesenta Corkidi (o Corkidhi, como él mismo lo escribía), se dio a conocer como fotógrafo predilecto del chileno Alejandro Jodorowsky, y posteriormente incursionó en la dirección con cintas como Ángeles y querubines (1972), Pafnucio Santo (1977) o Figuras de la pasión (1984) destacadas por su decidida y vanguardista propuesta narrativa y audiovisual.
Nacido en la cudad de Puebla, Puebla el 20 de mayo de 1930, Rafael Corkidi Acriche fue pionero del video en México, en los años ochenta. De formación autodidacta, muy joven emigró a la Ciudad de México, donde se inició en la fotografía comercial. Interesado en el cine y la fotografía en su juventud, comenzó a trabajar en Productores Unidos en los noticiarios cinematográficos Cine Mundial y Cinescopio. Fue asistente de los fotógrafos Nacho López y Antonio Reynoso (Fando y Lis, Jodorowsky, 1968) y del cineasta Rubén Gámez (La fórmula secreta, 1965). Formó parte del grupo Nuevo Cine y participó como operador en la película Tajimara (1965) de Juan José Gurrola.
Como cinefotógrafo filmó diversos cortos, documentales y entre otras, las películas: La mansión de la locura (Juan López Moctezuma, 1971), La montaña sagrada (Alejandro Jodorowsky, 1972), Peregrina (Mario Hernández, 1974) y La muerte de Pancho Villa (Mario Hernández, 1973).
En 1968 debutó como director y guionista con México 68. Instantáneas. Un par de años más tarde, Corkidi rodó una trilogía informal compuesta por Auandar Anapu (1974), Pafnucio Santo (1976), y Deseos (1977), largometrajes financiados por él mismo y por empresas estatales, algunos de los cuales fueron bien recibidos por la crítica que resaltaban sus virtudes de imagen y su audacia en la puesta en escena. El último de ellos, inspirado en la novela Al filo del agua de Agustín Yáñez, fue censurado por funcionarios del gobierno del expresidente de México, José López Portillo e incluso, Corkidi pasó un tiempo en la cárcel durante la "cacería de brujas" que desató Margarita López Portillo, hermana del presidente y directora de la entidad gubernamental Radio Televisión y Cinematografía (RTC).
Colaboró en el Canal 11 de televisión, para el que realizó varios programas de carácter cultural ("El Quijote", "Posada", "Juan Ramón Jímenez") y videoteatros. En los ochenta logró realizar una serie de videofilmes de medio y largometraje que le permitieron desarrollar sus intereses experimentales, tanto en forma como en contenido: Figuras de la pasión (1983), Las Lupitas y Relatos (1984, ambas), Huelga/Strike (1987), Señoras y señores (1988), Querida Benita (1989) y Forjadores (1990).
Este año al recibir el Ariel de Oro por su trayectoria de más de 60 años en la industria cinematográfica nacional el director, fotógrafo y guionista Rafael Corkidi apuntó que desde hacia ya un tiempo se había dedicado a buscar nuevas herramientas para hacer su cine:
"Yo nunca dejé el cine, dejé al sistema que nunca me quiso y cuando me dediqué a buscar nuevas herramientas descubrí que todos somos artistas".
Las obras más recientes de la prolífica carrera del poblano son Cantatas para la Independencia (2010), El maestro prodigioso (2010). En sus últimos años residió en Boca del Río Veracruz donde dirigía una pequeña escuela de cine y fotografía financiada con sus propios recursos.
JAR (@franzkie_)
FUENTE: CORRECÁMARA, STARMEDIA, IMDB
Escena inicial de la cinta Ángeles y querubines (1972).