Un joven austriaco de 24 años llamado Peter Handke causó un gran revuelo en 1966 cuando entregó una diatriba al círculo literario del Grupo 47 en la Universidad de Princeton, donde atacó a la literatura alemana por su “impotencia descriptiva”. Los críticos interpretaron esto como una autopromoción despiadada. Otros predijeron un rápido ascenso profesional. De hecho, ese mismo año, Handke celebró su primer gran éxito como autor con Los avispones (Die Hornissen), una novela que, inspirada en su propia vida, le sirve de pretexto al autor para encontrarse nuevamente con los traumas y terrores de su infancia, a través del recuerdo de hechos cotidianos vividos con su familia en el mundo rural.
El autor, poeta, ensayista, guionista, traductor y director de cine -beligerante y a veces malhumorado- crearía más de setenta historias y obras en prosa, además de aproximadamente dos docenas de obras de teatro. Su novela El miedo del arquero al tiro penal (Die Angst des Tormanns beim Elfmete), de 1970, fue uno de los primeros éxitos de ventas y ese mismo año fue realizado en cine por Wim Wenders. El filme se centra en un portero de futbol que pierde súbitamente la concentración en medio de un partido y es expulsado del juego. Confundido, vaga por la ciudad sin saber dónde ir y termina realizando acciones sin mucha explicación ni sentido.
Handke y Wenders se conocieron como estudiantes en 1966 y han mantenido una estrecha relación artística y personal. En 1975, el primero adaptó la novela de Goethe, Los años de aprendizaje de Wilhelm Meister, en un guion que se transformaría en Falso movimiento (1975), dirigida por el segundo. La obra se centra en Wilhelm, un hombre que tiene dificultades para escribir, así que su madre lo anima a irse de la ciudad para intentar recuperar la inspiración. En el compartimento del tren, Wilhelm conoce a Mignon, una adolescente muda, a Laertes, un hombre que se considera un artista, y a otros personajes que serán sus compañeros de viaje.
En 1987, Handke coescribió el guion de la película de Wenders, Las alas del deseo, relato que se centra en dos ángeles que sobrevuelan Berlín, ciudad dividida por el llamado “muro de la vergüenza”. Sólo son visibles para los niños y los hombres de corazón puro. Testigos impotentes que no pueden cambiar el curso de los acontecimientos, sienten una gran compasión por los seres humanos. Uno de ellos, decidido a conocer los sentimientos de los mortales, se enamora de una joven trapecista.
En 2016 Wenders adaptó la obra anterior de Handke, Los hermosos días de Aranjuez, que fue filmada en 3D. El drama, ambientado en un día de verano, se centra en un hombre y una mujer que hablan sobre sus experiencias sexuales, su infancia, la esencia del verano y lo que diferencia a los hombres de las mujeres. Sentado ante su máquina de escribir, un escritor trata de imaginar y transcribir ese diálogo. La película, filmada en una antigua casa de campo cerca de París, contó con la actuación de la esposa de Handke, Sophie Semin.
Como director de cine, Handke confeccionó cuatro largometrajes -el primero de ellos para televisión-: Chronik der laufenden Ereignisse (1971); La mujer zurda (1978), sobre un hombre que, luego de un viaje de negocios en Finlandia, descubre que su esposa quiere vivir sola con su hijo; Das Mal des Todes (1985), sobre una mujer que es contratada para pasar varios días y noches con un hombre en su departamento; y La ausencia (1992), relato en el que cuatro personas sin nombre (el anciano, la mujer, el soldado y el jugador) viajan a un páramo desolado más allá de los límites de una ciudad sin nombre.
Pero gran parte de los elogiados escritos de Handke ha estado envuelto en controversia. Habiendo crecido cerca de la frontera eslovena, fue un gran defensor de la ex Yugoslavia, que continuó apoyando a los serbios durante la Guerra de los Balcanes de los años noventa. En 2006, Handke asistió al funeral del exlíder serbio y presunto criminal de guerra Slobodan Milosevic, una figura que había elogiado durante mucho tiempo a pesar de ser acusado de genocidio; el escritor una vez también negó la masacre serbia en Srebenica. El nativo de Carintia en Austria (también vivió en Berlín con su madre al final de la Segunda Guerra Mundial) demostró que todavía podía discutir apasionadamente por sus convicciones. Después de que Handke describiera el bombardeo de Serbia por la OTAN como un crimen de guerra, fue atacado por políticos y medios de comunicación, un período retratado en su libro Voyage by Dugout or The Play about the Film about the War. En 2006, después de las feroces críticas por su asistencia al funeral de Milosovic, la nominación de Handke para el Premio Heinrich Heine de 50,000 euros fue retirada por algunos en el consejo de la ciudad de Dusseldorf. Handke luego dijo que no aceptaría el premio.
En 2016, a través de su documental titulado Peter Handke - In the Woods, Might Be Late, la cineasta Corinna Belz explora la vida y obra del literato, dramaturgo, guionista y activista político. En los años 60, él mismo era la definición de autor “pop star”. Sin embargo, cuando sus obras empezaron a llenar las estanterías de los bestsellers, le dio la espalda al estrellato y empezó a viajar, llevando a sus lectores con él, arrastrándolos al ritmo y la precisión de su lenguaje y a su particular observación de la realidad.
FUENTES CONSULTADAS:
- Contemporary German Stories: Peter Handke, Friederike Mayröcker, Uwe Timm and Others, editado por A. Leslie Willson (Continuum, New York, 1998).
- Encyclopedia of German Literature, editado por Matthias Konzett (Fitzroy Dearborn Publishers, Chicago, 2000).
- Experiments in Life-Writing: Intersections of Auto/Biography and Fiction, editado por Clare Brant (Palgrave Mac Millan, 2017).