Es el movimiento más popular en el circuito de la temporada de premios en estos días: utilizar un discurso de aceptación para rendir homenaje a tus héroes cinematográficos mientras también intentas colocarte en tu próximo gran proyecto. En los premios del Círculo de Críticos de Cine de Nueva York de la semana pasada, la estrella de Phantom Thread, Lesley Manville, reemplazó a Paul Thomas Anderson cuando llegó el momento de aceptar su premio al Mejor Guion, leyendo un discurso que incluyó una apelación a la ganadora de la Mejor Actriz de Reparto, Tiffany Haddish.

En el evento de premios de la National Board of Review del martes por la noche en la ciudad de Nueva York, esto volvió a ocurrir con el ganador Timothée Chalamet, la estrella reveladora de Call Me By Your Name, usando su propio discurso de aceptación para profesar su adoración por Anderson, “pidiendo a gritos” trabajar con el director  al concluir su encantador discurso.

Inicialmente tocando a la multitud de su ciudad natal, Chalamet primero enmarcó su discurso sobre la historia de la organización con sede en Nueva York, su amor por su ciudad compartida y la forma en que los ejercicios de actuación aparentemente extraños (principalmente, la técnica Meisner) se han quedado con él desde la secundaria. Hubo un punto, sin embargo, que condujo directamente a Anderson y su Punch-Drunk Love, una película formativa que Chalamet menciona en el mismo aliento que su también amado The Dark Knight.

“Estuve saliendo con algunos amigos una noche, y decidimos ver algo gracioso”, recordó. “Elegimos al azar una comedia de Adam Sandler que pensamos que tenía un cartel genial: Punch-Drunk Love. Quedó claro desde la primera toma larga y amplia de Sandler en el escritorio, donde está en una profunda discusión sobre cupones, que esto no era una cursi comedia de Adam Sandler”.

Continuó:

Me senté allí mirando y mirando y mirando, y luego algo sucedió, hizo clic. Estaba dentro del mundo de un introvertido, de la forma en que solo me había ocurrido leyendo libros como The Perks of Being a Wallflower o algo así como Crime and Punishment. Adam Sandler me dio una pista sobre un mundo en el que nunca había estado, y luego todo había terminado.

Chalamet estaba entusiasmado; él y sus amigos pronto comenzaron a descubrir todo lo que pudieron sobre PTA y su obra.

El escritor y director fue Paul Thomas Anderson. “Es un nombre genial”, pensé. Es un nombre genial, podría ser un rapero o algo así. Así que corrí a casa y vi la única otra película disponible de él en Netflix, porque soy un millenial: The Master.

Fue la única vez que tuve la reacción visceral que experimenté mientras veía The Dark Knight seis años antes. A los cuarenta minutos de la película, hay una escena de procesamiento, una especie de interrogatorio, el personaje de Philip Seymour Hoffman le dice a Joaquin Phoenix que tiene que responder honestamente y sin parpadear a todo lo que le pide. Fui derrotado.

Para Chalamet, fue la técnica de Meisner, hecha realidad:

La escena contenía dos maestros en el trabajo, abiertos, vulnerables, en el caso del Phoenix, físicamente se percibía una especie de auto-odio. Hasta el día de hoy, no conozco una escena que se sienta tan intensamente honesta ... La escena fue de alguna manera desordenada, y la actuación más directa que he visto.

Continuó:

Creo que hay algo agradable en escuchar tu propia voz, gritar a tu héroe, en frente de tu héroe, porque sé que está en algún lugar aquí esta noche, creo que está en algún lugar aquí esta noche. Y sé que este grito no aumenta la probabilidad de que pueda trabajar contigo, pero ese no es el objetivo. Quiero decir, si quieres trabajar, hablemos. Lo resolveremos, ya sabes. Por el contrario, solo quiero dar las gracias, porque el señor Paul Thomas Anderson, usted es una de las principales razones por las cuales me encuentro en este escenario en este momento y me siento honrado de estar en cualquier tipo de programa con su nombre en él y porque eres un genio.

Chalamet tenía, por supuesto, razón: Anderson estaba en el recinto, y casualmente aceptó su premio al Mejor Guion Original inmediatamente después de que el joven actor saliera del escenario. Sus primeras palabras fueron: “Estás encendido, Timothée”.

Trad. EnFilme

Fuente: IndieWire