Al igual que su predecesora (The Purge, 2013), The Purge: Anarchy (2014) sucede en un futuro cercano en Estados Unidos, donde el gobierno ha decidido implementar “La noche de la expiación” o “La purga”, un periodo de 12 horas donde todos los crímenes (incluso el asesinato) son legales; las estaciones de policía, los hospitales y los servicios de emergencia cierran y dejan de brindar servicio. En ese panorama la gente tiene la posibilidad de expiar sus rencores, inseguridades, traumas, odios o venganzas, para después volver a su vida normal.
El filme original, un thriller con tintes de horror protagonizado por Ethan Hawke, consistía en la invasión que sufría una familia al interior de su casa, pero ahora, esta secuela se centra en espacios abiertos y lo que ocurre en las calles.
Una pareja, Shane (Zach Gilford) y Liz (Kiele Sanchez), se dirigen a su casa –en compañía de sus hijos– para encerrarse durante la purga. Sin embargo su automóvil se queda sin gasolina y deberá huir de un grupo de enmascarados que en motocicletas circulan por las calles con la intención de matar gente. Por su parte, Leo (Frank Grillo) decide salir a la calle para vengarse del hombre que mató a su hijo, al mismo tiempo que una madre y su hija, Eva (Carmen Ejogo) y Cali (Zoe Soul), escapan de su casa después de que ésta es destruida por un grupo de asaltantes. Los caminos de las cinco personas se cruzan para intentar sobrevivir la noche en Los Ángeles, sin embargo, los protagonistas terminan en un evento social organizado por millonarios de la ciudad que acuden a una especie de subasta donde eligen a su víctimas.
El filme es dirigido por James DeMonaco, quien ya estuvo al frente de la primera parte, y llegará a las salas norteamericanas el próximo 18 de julio.
LFG (@luisfer_crimi)
Fuente: Empire