Ser adolescente es difícil, es la etapa en donde uno intenta encontrar su identidad, incluso si se está interesado en ser vampiro. Esa es la raíz de The Transfiguration, el primer largometraje escrito y dirigido por el estadounidense, Michael O'Shea.
La película está situada en Nueva York. Milo es un adolescente con problemas que se esconde detrás de su fascinación por los vampiros. Cuando forma un lazo con Sophie, la fantasía y la realidad comienzan a superponerse de una manera oscura. El resultado es un retrato escalofriante de violencia, junto con un montón de sangre.
La película, protagonizada por Eric Ruffin (The Inevitable Defeat of Mister & Pete, 2013) y Chloe Levine (Innocence, 2014), se presentó en el South by Southwest de este año y fue parte de la selección oficial del Festival de Cannes del año pasado.
En este clip, se ve el vínculo que existe entre Milo y Sophie mientras platican sobre lo que es ser vampiro.
SHS (@plumadequetzal)
Fuente: IndieWire