En Lovers in a Park (1758), el pintor francés, François Boucher, recrea un exuberante jardín donde una joven pareja y su perro se han detenido a descansar mientras pasean. El hombre, que está tejiendo flores en el cabello de su amada, se distrae con la aparición de otra mujer, que ha estado recogiendo sus propias flores. Cualquier tensión potencial en el encuentro de sus miradas es borrada por la calidad idealizada de la escena. Los pliegues cremosos del vestido de la mujer sentada y el follaje ricamente labrado de los arbustos y árboles circundantes personifican la expresión de Boucher del rococó, un estilo que, además de su elegancia exacerbada, se centraba en los principios de teatralidad y exuberancia para crear atmósferas sobrecargadas, pero llenas de la tranquilidad, la jovialidad y la despreocupación característica de la élite europea del siglo XVIII.
Esta misma línea es recuperada en Des amoureux dans l’herbe // Lovers in the park, un video elaborado por Trois Couleurs que recupera algunas de las parejas y amantes de los relatos cinematográficos que prefieren encontrarse sobre la hierba suave de los jardines.
EF (@EnFilme)
Fuente: Trois Couleurs