Video: La importancia del plano subjetivo en el cine de los hermanos Coen
Video: La filosofía de vida de los hermanos Coen en ‘A Serious Man’, un videoensayo
El director mexicano, Guillermo del Toro (Crimson Peak, 2015; El laberinto del fauno, 2006), platicó con los hermanos Joel y Ethan Coen sobre el proceso de realización de su fenomenal drama Inside Llewyn Davis (2013), como parte de las características especiales del Blu-Ray de The Criterion Collection.
Partiendo de Blood Simple (1984), y cómo éste refleja la mayor parte de su trabajo hoy en día, la conversación de 40 minutos salta hacia Inside Llewyn Davis y discuten la trama suelta de la película, cómo la música folclórica es imposible de parodiar, por qué nunca harán una película sobre un cantante de folk exitoso, y mucho más. En el siguiente extracto de su ensayo, Kent Jones hace una reflexión sobre el cine de los hermanos Coen:
Como el mercurio en un nido de grietas, las películas de Joel y Ethan Coen fluyen y revierten el curso a una velocidad demasiado rápida para la mente. Estos artistas poner mucha energía en la creación de filmes que no pueden ser ni acorralados ni inmovilizados, y que son imposibles de archivar de tal o cual forma, perspectiva, o postura. Lo que empieza como un Dashiell Hammett – inspirada pieza de humor (Miller’s Crossing, 1990) estalla de repente en pasajes de absurdísimo llamativo, que dan forma a retrasos inspirados en vodevil que, imperceptiblemente, se transforman en pasajes de contemplación mística, que se vuelven tragedia y luego vuelven otra vez al absurdo –y la sugerencia de infinitud. Un retrato de la vida judía de finales de los años sesenta de la clase media en los suburbios de Minneapolis (A Serious Man, 2009) sigue cambiando registros –sin aparente esfuerzo y con tanta destreza– desde el amor Proustiano a la salvaje satírica, a lo inefablemente triste y extraño, y en el camino, nos dejan considerar la relación de la acción con el "cuento" yidis que la precede. El aparentemente sencillo y comparativamente ligero Burn After Reading (2008) realiza tantos giros inesperados lejos de la sátira de la cultura burocrática de Washington que parece ser –en esa obsesión con estar en forma, lo extraño de ser un americano reservado y sin educación, la mayor rareza de la cultura de club de los hombres mayores y la manufactura casera de parafernalia sexual– que para el momento que sales de la película, tu cabeza da vueltas como un giroscopio.
Abajo puedes ver un fragmento de la conversación con Guillermo del Toro.
CRM (@carociwa)
Fuente: The Film Stage