“Son zombis”. La simple explicación de un personaje para el caos que se está produciendo en una pequeña ciudad es todo lo que necesita saber para prepararse para The Dead Don’t Die (2019), la nueva comedia de terror de Jim Jarmusch. La película reúne al cineasta con algunos de sus habituales colaboradores, entre ellos Adam Driver, Tilda Swinton y Bill Murray, para narrar cómo dos policías locales deben entrar en acción cuando un brote de zombis comienza a afectar a la comunidad.
“Estos no muertos en nuestra película tienen una especie de memoria vestigial por una cosa con la que estaban obsesionados cuando estaban vivos”, explicó Jarmusch. “Y en este caso, estando borracha la ciudad, su obsesión era Chardonnay”.
Pero no esperes un baño de sangre completo. El cineasta también dijo que no quería hacer una película de salpicaduras. La película se vuelve sangrienta ocasionalmente, pero sólo cuando los muertos vivientes atacan a los vivos. Los zombis están hechos de polvo en el interior, que se eleva en el aire cuando son asesinados. “Las cenizas a las cenizas, el polvo a polvo”, dice Jarmusch al momento de describir un fragmento de su filme en Anatomy of a Scene.
Trad. EnFilme
Fuente: The New York Times