Aunque no es tan querido como The Simpsons, Matt Groening y David X. Cohen han acumulado un culto dedicado a Futurama desde su carrera inicial que prácticamente le ha valido al espectáculo un lugar garantizado en la cultura pop del siglo XXI.
Futurama, una comedia de animación de ciencia ficción sobre un hombre que repartía pizzas llamado Fry que se transporta al año 3000, corrió durante 14 años y siete temporadas en Fox. Si bien no puede presumir de tantos personajes, momentos o frases memorables como la mordaz disección de Groening de la familia nuclear estadounidense, Futurama fue su propia riqueza para aquellos en sintonía con su extraña longitud de onda. La influencia del programa se extiende a muchas de las mejores comedias de animación de la actualidad, por ejemplo, Rick and Morty y Bojack Horseman.
Un videoensayo titulado Futurama: The Science of Comedy examina cómo un verdadero amor por la ciencia y las matemáticas se tradujo en la voz de autor del programa. El video hace especial hincapié en el excelente episodio de la tercera temporada Godfellas, en el que el robot residente Bender se convierte en su propio Dios microcósmico. Tomado en sus propios términos, es un buen truco, pero Groening y Cohen transforman la narrativa ridícula del episodio en una metáfora astuta de la necesidad desesperada de la humanidad de creer en un poder superior.
Trad. EnFilme
Fuente: The Playlist