Video. Ve aquí nuestra entrevista con Rodrigo Prieto, cinefotógrafo de 'Silence'
Silence (2016), de Martin Scorsese, le enseña a uno a cuestionar los contenedores (o formas) de su fe y considerar más completamente el contenido de su fe. Extiende nuestro pensamiento sobre lo que significa ser proselitista en otra cultura. Nos mueve a pensar sobre las formas de tal evangelismo y lo que significa ser cristiano.
La película sigue la historia de dos sacerdotes jesuitas portugueses, Sebastião Rodrigues (Andrew Garfield) y Garupo (Adam Driver), mientras buscan a su mentor y líder Cristóvão Ferreira (Liam Neeson). Como los estudiantes de historia cristiana pueden saber, Ferreira fue un misionero en Japón que apostató. Cuando Rodrigues y Garupo se enteran de este rumor, no lo creen, y van a buscar a su mentor, quien supuestamente se hizo budista y se casó. En el camino, los dos sacerdotes ponen a prueba su fe en numerosas capacidades, al ser torturados y amenazados, y al hacer que sus seguidores también sean torturados y probados. La tensión ética entre "pisotear" a un fumi-e (que es pisarlo) para renunciar a la fe de uno para proteger a sus camaradas, en lugar de resolver nunca negar a Cristo es una pregunta profunda. La película lucha con esta idea, y Rodrigues y Garupo a menudo están en diferentes extremos del debate.
La parte conmovedora de la película no es solo ese dilema ético, sino la búsqueda de la presencia de Dios en él. Dios permanece dolorosamente ausente en muchos momentos de la película, especialmente cuando la liberación resolvería la tensión misma en este ejercicio teleológico y deontológico. La adaptación de Scorsese de la novela de Shusaku Endo no es solo una obra maestra del cine sino también una meditación incómoda y profunda sobre el cristianismo. En Silence: The Deconstruction of Faith, videoensayo de Josh Keefe, se explora la espiritualidad y los dilemas de la fe.
Trad. EnFilme
Fuente: Josh Keefe