A Woody Allen le encanta jugar con las ideas de sus héroes y contemporáneos. Y en Crimes And Misdemeanors (1989) recurrió a uno de los mejores novelistas que haya existido, Fyodor Dostoievski. Uno de los mejores trabajos del autor ruso y una lectura obligada para cualquier literato o cinéfilo, Crimen y castigo, fue la inspiración específica de Allen para la película y brindó un telón de fondo de la angustia existencial y el dogmatismo.
En un videoensayo de Digging Deeper se profundiza en la moralidad cuestionable de los dos protagonistas de la película, Judah Rosenthal (Martin Landau), un oftalmólogo adinerado, y Cliff Stern (Woody Allen). Como siempre, Allen imbuye la historia de cada personaje con humor negro; pero cada uno frente a su propio dilema, Judah y Cliff deben decidir permanecer leales a sus ideales o abandonar lo que creen por su propio sustento.
En la cima del mundo en su campo, pero luchando con una amante salaz, Judah se enfrenta a la inevitable decisión de que la asesinen. Yuxtapuesto a las visiones de su juventud y las propias palabras de su padre, “los ojos de Dios siempre están sobre nosotros”, el descenso de Judah a la culpa y la desesperación llega cuando traiciona la moralidad por completo, enfrenta su pérdida colectiva de fe y vuelve a ser el mismo viejo Judah, sin pestañear por lo que había hecho.
Por otro lado, Cliff, también atrapado en un matrimonio sin amor, está en el fondo de la proverbial cadena alimenticia, tratando de completar su proyecto de pasión mientras su exitoso cuñado Lester (Alan Alda) le ofrece un lugar en su próxima película. Mientras trabaja en algo que odia, Cliff se enamora de Halley Reed (Mia Farrow), la asistente de Lester, y decide no solo perseguirla románticamente, sino también mantenerse fiel a sus creencias y crear una película que difumina a Lester. Lamentablemente, los sueños de Cliff se anulan cuando Halley pronto se compromete con Lester, y el tema de su proyecto original de pasión muere.
Allen anula las expectativas de la novela de Dostoievski, los malvados son recompensados, los creyentes son cegados y los culpables son perdonados, con algunas risas en medio.
Trad. EnFilme
Fuente: The Playlist