Desde el Sena arropado por el sol de Le signe du lion (1959) hasta los lugares idílicos a lo largo de Côte d'Émeraude que se convierten en un campo de batalla romántica para el personaje de Gaspar en Cuento de verano (1996), uno de los elementos que aparece constantemente en el cine de Eric Rohmer es el agua, desde las atractivas playas hasta las tranquilas lagunas. Esto se debe, en gran medida, a que muchos de los relatos de Rohmer se desarrollan en el transcurso de unas largas vacaciones (por lo general en lugares cerca de las costas), durante el cual los personajes tienen tiempo suficiente para disfrutar de la naturaleza y reflexionar en una agradable tarde soleada en la playa. El bronceado, la natación y la navegación se presentan, entonces, como acciones esenciales que llevan a cabo los personajes.
Rohmer at the Water, videoensayo editado por Tope Ogundare, explora la presencia y la importancia del agua, así como los posibles significados en la obra del realizador francés. El agua como elemento natural volátil y violento; el agua como un modelo del ideal psicológico de la armonía intrínseca al que aspiran los personajes; el agua como fuente de recreación, fascinación e inspiración; el misterio fundamental del mar y lo que se esconde detrás del lejano horizonte; el agua como la frontera entre la tierra y el mar, a veces para representar el estancamiento de un personaje o su incapacidad para ir más allá de ciertos límites emocionales; el agua como un recurso literario y artístico.
LFG (@luisfer_crimi)
Fuente: Fandor Keyframe