Unir los vacíos en nuestras vidas puede tener connotaciones espaciales o metafísicas. Cuando se trata de Bill Murray y Scarlett Johansson encontrándose en un país extranjero, compartiendo los momentos de sus respectivas existencias en Lost in Translation (2003), las atmósferas visuales son tan importantes como las acciones narrativas. Al cruzar el espacio negativo en medio del encuadre, cuando ambos personajes abrazan los bordes de la pantalla, es como muestran su falta de voluntad para cambiar. Hay miedo y complacencia alojados en su estancamiento. Sólo cuando se cruzan es posible el desarrollo.
Crossing the Frame: Lost in Translation, videoensayo de Fabian Broeker, examina los espacios vacíos en el filme de Sofia Coppola como un ejercicio de segregación, convergencia y reflejo de cómo se vinculan los personajes entre ellos y dentro del marco.
“Se miran el uno al otro a través del ascensor vacío, ambos apoyados contra las paredes”.
Sofia Coppola, Lost in Translation
EF
Fuente: Fabian Broeker (Vimeo)