Han transcurrido 10 años desde que Michael Fassbender hizo su debut en la pantalla grande con 300 (2006) de Zack Snyder. Desde entonces se ha convertido en uno de los actores más aclamados de su generación. El hecho de trabajar con directores tan singulares y aclamados como Steve McQueen, Quentin Tarantino, Andrea Arnold, David Cronenberg, Danny Boyle, Ridley Scott y Justin Kurzel han forjado una sólida, equilibrada y prestigiosa carrera.

En los diez años que ha estado en la pantalla grande, Fassbender nunca ha dependido de un cierto modo de actuación. Su rostro está siempre en el centro de su actuación, y cada vez sus expresiones faciales han evolucionando con la intención de no repetirse y adaptarse de la mejor manera a las emociones, sensaciones, ideales y motivaciones de sus personajes. Por decirlo de algún modo, el rostro expresivo de Fassbender es capaz de contorsionarse en cada interpretación. Aunque es evidente que se trata de la misma cara, son los sutiles cambios que aporta a cada uno los que hacen la diferencia.

En Hunger (Dir. Steve McQueen, 2008) posiblemente su primer papel importante, fue ampliamente elogiado por el aspecto físico de su actuación. La película se centra en el cuerpo de un preso en huelga de hambre y la disposición de Fassbender para replicar este cuerpo a través de la pérdida de peso extrema, le hizo ganar mucha atención. Sin embargo, algunas de las escenas más poderosas de la película se expresan únicamente a través de los primeros planos. McQueen deja que la cámara descanse en la cara de Fassbender por períodos tan largos de tiempo que es evidente cuánto se está contando a través de las expresiones faciales.

A continuación te compartimos esta extraordinaria recopilación –elaborada por Daniel McIlwraith–, de los rostros del actor irlandés nacido en Alemania.

LFG (@luisfer_crimi)

Fuente: Fandor Keyframe